El intendente de la Policía de Vila-real, Ramón Martínez, dio a conocer ayer el balance de los primeros 15 días de la campaña de control de velocidad. Así, de los 1.521 vehículos vigilados, se denunció a 41 y la infracción más grave se detectó en la avenida Castelló, donde un turismo fue cazado a 86 kilómetros por hora.

Tal como detalló Martínez, “el conductor fue multado con 400 euros y se le restaron cuatro puntos del carnet”. Las otras avenidas conflictivas son Portugal y Europa aunque, a la hora de establecer los puntos de control, también se han tenido en cuenta las denuncias de los vecinos al respecto. Asimismo, la zona residencial de verano ha sido otro de los distritos en los que se ha tenido una especial incidencia.

Por otro lado, en la campaña de vigilancia de este entorno se ha detectado un incremento de las denuncias por tenencia y consumo de drogas respecto al año pasado y se han cometido hasta 20 infracciones. H