Es como si nos hubiese tocado la lotería”. Así se expresó ayer Pilar Broch, uno de los siete funcionarios interinos que el anterior equipo de gobierno del PP despidió en febrero, nada más terminar el pleno extraordinario convocado para aprobar, entre otros puntos, un acuerdo transaccional por el que les devuelven sus puestos de trabajo, “lo más probable que a partir de noviembre”, una vez lo ratifiquen los juzgados.

“Estamos muy contentos y agradecemos al equipo de gobierno que haya resuelto lo que calificamos como una injusticia”, manifestó Lourdes Burdeus, una de las cuatro mujeres que acudieron para comprobar in situ que la iniciativa salía adelante, con los votos de PSOE, IU, Iniciativa y Bloc, y la negativa de los populares.

En concreto, este pacto suscrito por el alcalde, José Benlloch, y los perjudicados --seis del Servei Municipal d’Esports y una de la Concejalía de la Mujer-- establece que estos renuncian a la indemnización y a la antigüedad de los meses que han estado en el paro, a cambio de que continúen en el mismo puesto que tenían antes de la remodelación que hizo el PP. Por el camino se quedan otros 15 que en su día no optaron por denunciar el supuesto despido improcedente y que, al transcurrir el tiempo establecido y estar el asunto en los tribunales, ya no podrán recuperar su plaza.

El portavoz adjunto del PSPV-PSOE, Javier Serralvo, argumentó que “los asesores jurídicos nos han constatado que no teníamos posibilidad de ganar el juicio que debía comenzar el próximo febrero y que el total de las indemnizaciones superarían los 200.000 euros”. A esto, el primer edil añadió que cuentan con informes de los técnicos municipales que dicen que “existe una partida presupuestaria para cubrir los costes y los funcionarios son necesarios”. Sobre este segundo aspecto, el munícipe recordó que “este mismo verano no hemos podido abrir algunas instalaciones deportivas municipales y nuestros vecinos han tenido que irse fuera para practicar deporte debido a que los bedeles habían sido enviados a sus casas”.

Por su parte, el portavoz del PP, Héctor Folgado, justificó su voto en contra recriminando que “el expediente del caso no cuenta con el informe de la jefa de Personal” y criticó el hecho de que el interventor haya emitido una nota de reparo, “cosa que el cuatripartito prometió que no haría nunca”. Además, preguntó por qué no contrataban también al resto de funcionarios, “visto que el Ayuntamiento goza de una buena situación económica gracias a la gestión que realizamos el anterior equipo de gobierno”.

Las interinas presentes en la sala reprocharon que les habían dicho que los despidos “fueron aleatorios, pero qué casualidad que la mayoría era gente que no estaba empadronada”. Otra de las afectadas relató que “en mi caso no había motivo para darme el finiquito ya que enseguida contrataron a otra persona que realizaba mis funciones”. Por último, las cuatro lamentaron la situación de sus otros compañeros, aunque dicen que “hubiesen tenido que denunciar”.