Los ayuntamientos de Vila-real y les Alqueries rubricaron ayer el documento que pone en marcha un novedoso banco de tierras único y conjunto, a iniciativa del Sindicato de Riegos de Vila-real, y en el que también participan las organizaciones agrarias --Unió de Llauradors i Ramaders y Asaja-Fepac-- de ambos municipios.
José Pascual Carda, presidente de la Comunidad de Regantes de Vila-real --cuyo ámbito de actuación abarca toda la zona de l’Horta de esta ciudad, así como la partida de Cap de Terme, en les Alqueries; y una pequeña porción de terrenos en Burriana--, destacó la importancia de esta iniciativa, a través de la cual los propietarios que han abandonado sus huertos o están pensando en hacerlo tienen la posibilidad de cederlos en alquiler, de manera que otras personas puedan recuperar el cultivo de los mismos.
Y es que en el ámbito del Sindicato de Riegos se calcula que existen unas 5.000 hanegadas de tierras en proceso de abandono o completamente dejadas, lo que representa el 25% de la superficie del área rural de l’Horta.
En la presentación del proyecto de recuperación de tierras estuvieron presentes, además de Carda, la alcaldesa de les Alqueries, Consuelo Sanz; su homólogo vila-realense en funciones, Pasqual Batalla; y los ediles de Agricultura, Vicent Bodí y Emilio Obiol.
Todos ello coincidieron en asegurar que esta puede ser una buena alternativa para reducir los índices de paro en ambos municipios, a través del cultivo de hortalizas o frutas, preferentemente distintas a los cítricos. Además, se buscarán canales de comercialización de los productos que se cultiven y se incluirá un espacio para la agricultura ecológica.
