El alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha anunciado que llevará al próximo pleno que celebre la corporación municipal una propuesta encaminada a reclamar a la Generalitat el pago de la deuda que mantiene con los centros educativos, tanto públicos como concertados de la ciudad.

El primer edil vila-realense afirma que la situación es “insostenible” y que ha tomado la decisión de someter al pleno esta propuesta “ante los reiterados incumplimientos por parte del Consell, para plantar cara y solucionar cuanto antes la difícil situación económica que están viviendo los colegios del municipio”. Una situación que, asegura, está llevando a la “asfixia económica” a los centros escolares.

De hecho, y según ha podido saber Mediterráneo, algunos colegios --como es el caso del concertado de Bisbe Pont-- se han visto obligados a eliminar la calefacción en las aulas, de manera que han pedido a los padres que sus hijos lleven mantas para paliar el frío en clase. En otros, también en los públicos, se han suprimido actividades extraescolares.

Benlloch asegura que es su “responsabilidad” defender los intereses de la comunidad educativa de Vila-real, “máxime conociendo de primera mano los auténticos dramas por los que atraviesan nuestros colegios”.

A este respecto, el munícipe explica que muchas de estas escuelas “no pueden afrontar los gastos de personal o de funcionamiento más básicos ni tampoco pueden pagar a sus proveedores”.

En este caso, y según han confirmado a este rotativo responsables de colegios vila-realenses, las dificultades alcanzan, incluso, al servicio de comedor escolar. “Lo único que se puede abonar es la cuota que pagan los padres por la comida diaria, que se suplementa con la aportación que tendría que realizar la Conselleria de Educación y que no llega”, dicen.

También Benlloch insiste en que se trata --la deuda del Consell con los centros escolares-- de “un dinero muy necesario, porque está afectando, en algunos casos, a la luz, el teléfono, el material didáctico o el mobiliario.

El alcalde ya aprovechó la inauguración del CEIP José Soriano para pedir al presidente Alberto Fabra el pago de esta deuda. H