Vila-real vivió un nuevo acto en recuerdo de las 69 personas que fallecieron, hace ahora 100 años, en el trágico incendio del cine La Luz, mientras contemplaban algunos cortos.
Y es que al homenaje que se les rindió el pasado domingo, con una serie se actos institucionalizados por el Ayuntamiento y con la asistencia de la corporación municipal, se sumó ayer la celebración de una misa en la iglesia arciprestal. Una misa que ofició y presidió el obispo de la diócesis, Casimiro López Llorente, y en la que tampoco faltó una amplia representación del consistorio, encabezada por el alcalde, José Benlloch.
López Llorente lanzó una plegaria por los 69 vecinos que perecieron en aquel incendio y que, también desde el domingo, cuentan con una placa de homenaje en la fachada del edificio que ahora ocupa el espacio en el que se hallaba el cine La Luz, en la esquina de la avenida la Murà y la calle Borriana.
“La sensación por cómo están resultando todos los actos es maravillosa”, afirma Vicente Manrique, principal impulsor de las citas para conmemorar el centenario de esta efeméride. “En los últimos 10 años se ha trabajado para que Vila-real no olvidara lo ocurrido y a aquellos que perecieron, y creo que lo hemos conseguido, como muestra la aceptación de los actos y el apoyo del Ayuntamiento”, señala Manrique.
La tragedia marcó un antes y un después a la hora de endurecer la legislación en materia de seguridad en los inmuebles destinados a cines, teatros y otras actividades de tipo público.
