Vila-real prevé implantar la velocidad máxima de 30 kilómetros por hora en el centro para potenciar el uso de la bicicleta a través de ciclocalles, en el marco de una red de carriles bici por toda la ciudad que contempla dos anillos circulares --uno de ellos a través de las rondas-- y un entramado en forma de araña. Así lo dio a conocer ayer el edil de Medio Ambiente, Xus Sempere, quien anunció que han encargado un estudio técnico al Instituto de Transporte y Territorio de la Universitat Politècnica de València para que determine en tres meses cuál es el entramado “más idóneo”.

“Esta entidad se encargará de hacer un primera toma de contacto y una comprobación de los datos en las calles indicadas colocando medidores de tráfico digitales”, señaló el responsable del área, quien añadió que “después, está previsto que se reúnan y que intercambien opiniones con los técnicos del Ayuntamiento”.

De momento, la universidad está trabajando par ver si resulta factible la propuesta planteada por el consistorio y para marcar los problemas con los que se podría encontrar para “proporcionar las mejores soluciones desde su experiencia”, detalló Sempere. “En la actualidad, están estudiando si por las calles que les hemos indicado es mejor crear un carril bici independiente, una vía ciclable que compartiría espacio con los coches o si se separan los espacios con una línea pintada en el suelo”, detalló el edil.

Otro de los aspectos que tendrán en cuenta son la ordenanza local y la de tráfico para dar preferencia a las bicis o a los vehículos a motor en según qué lugares.

Una vez está finalizado el estudio, el equipo de gobierno prevé ejecutar “este ambicioso proyecto a largo plazo, ya que se trata de una iniciativa para quedarse y formar parte de la ciudad”, remarcó. A este respecto, matizó que si en un futuro hay otro gobierno en el Ayuntamiento, confían en que “la red de carriles siga desarrollándose y haciéndose cada vez más grande”.

Finalmente, el edil explicó que “el propósito de la Concejalía es abrir un proceso de participación ciudadana para que los vecinos colaboren en el diseño de la distribución”. Por ese motivo, cuando esté concluido el estudio se abrirá un proceso de reflexión para poder recoger todas las opiniones y las dudas que surjan, como la posible eliminación de plazas de párking para reconvertirlas en viales para bicicletas.

Sempere recordó que la Generalitat valenciana ha anunciado en diversas ocasiones que prevé realizar los estudios informativos sobre los carriles bici de Vila-real a Burriana y de la ciudad a Almassora, lo que incluye el tramo urbano que discurre entre la localidad y la ermita de la Mare de Déu de Gràcia.

A este respecto, el edil criticó que “no parece que haya novedades sobre el tema”, y añadió que este tramo es “independiente” a la futura red de carriles bici de Vila-real. De este modo, anunció que “existe la posibilidad de que el Ayuntamiento se haga cargo del proyecto más adelante”.