El Ayuntamiento de Vila-real firmará en breve un convenio con la Fundación Europea para la Sociedad de la Información y la Administración Electrónica para la instalación en diferentes barrios de la ciudad de cuatro oficinas electrónicas que permitirán “acercar el Ayuntamiento al ciudadano y mejorar el servicio que presta el consistorio”. Estas oficinas electrónicas harán posible que los vila-realenses realicen diferentes trámites administrativos, como el de registro, para los que ahora se deben desplazar hasta la casa consistorial. El alcalde de la ciudad, José Benlloch, y la concejala de Proximidad, Sabina Escrig, han dado a conocer hoy los detalles de este futuro convenio, que se enmarca en la concesión a Vila-real del distintivo como Ciudad de la Ciencia y la Innovación y que sitúa a la población de nuevo como pionera y referencia en la provincia de Castellón.

“La instalación de estas oficinas electrónicas es un ejemplo más de que este equipo de gobierno cumple con sus compromisos con la ciudadanía, como lo hemos hecho con la congelación de la contribución, la austeridad o el freno a las irregularidades en la gestión municipal”, señala Benlloch, quien recuerda que uno de los principales compromisos con los vecinos al asumir el gobierno municipal fue el de “abrir las puertas del Ayuntamiento a la población”. “Desde el primer momento, siempre hemos pensado que Vila-real es una ciudad grande que requiere la creación de distritos, pero la prohibición del Gobierno central de crear empleo público y la situación de crisis económica que vivimos nos impide poner en marcha estos distritos con personal y estructura administrativa en las diferentes zonas de la ciudad”, señala Benlloch. En esta línea, puntualiza el alcalde, la instalación de las oficinas electrónicas permitirá a los ciudadanos poder acceder a todos los servicios de la Administración a través de las nuevas tecnologías en los cajeros que la Fundación Europea para la Sociedad de la Información y la Administración Electrónica colocará en las sedes vecinales.

El convenio contempla la instalación inicial de cuatro oficinas electrónicas por un periodo de ocho años, financiadas por la entidad pública europea de manera que el consistorio sólo tendrá que pagar por los costes de mantenimiento un precio que, tras las negociaciones mantenidas con la fundación, será de 100 euros mensuales por cada uno de los cajeros durante el primer año y 200 euros en los años sucesivos. “Las oficinas electrónicas son como pequeños ayuntamientos en los que los vila-realenses podrán acceder a todos los servicios que ofrece el consistorio, a la página web, al registro y a todos los trámites que necesiten”, señala al respecto la concejala de Proximidad, quien explica que la Fundación Europea para la Sociedad de la Información diseñará las oficinas en función de las necesidades y las indicaciones del propio Ayuntamiento, que ya trabaja en el diseño de la cartera de trámites y servicios que serán accesibles desde estos cajeros.

Para la ubicación definitiva de las oficinas, Escrig apunta que se consensuará, en contacto también con la concejalía de Participación Ciudadana, con las propias asociaciones de vecinos para determinar aquellas donde su instalación puede ser más necesaria y efectiva. A este respecto, Benlloch ha valorado que la decisión de instalar este servicio en las sedes vecinales, que están en edificios municipales, responde a la voluntad de “acercar también las asociaciones a los ciudadanos y convertirlas en un punto de dinamización y de pulso de las necesidades sociales”.