El Ayuntamiento de Vila-real quiere que el restaurante el Molí del Termet abra de nuevo sus puertas antes de finalizar este año. Esta es la intención del equipo de gobierno, según reveló el alcalde, José Benlloch, quien indicó que “la idea sería que pudiera estar operativo para Nochevieja”.
El objetivo es acelerar los plazos para volver a adjudicar la instalación hostelera. “Intentaremos acortar el proceso como sea para poder dotar al enclave de este servicio”. En la actualidad, dos peritos están analizando el estado del mobiliario del anterior adjudicatario para obtener una tasación real y pagar un precio justo por el mismo. Además, Benlloch confía en que “en unas dos semanas este trámite haya concluido y podamos publicar las bases de la licitación del establecimiento”.
El ejecutivo local busca que el paraje cuente con un espacio gastronómico de referencia para complementar la oferta de naturaleza y ocio. A finales del año pasado, el concesionario del bar dejó su explotación y, desde entonces, se están buscando fórmulas para volverlo a adjudicar.
ESPACIO DEPORTIVO // Por otro lado, y ya que el tiempo ha acompañado hasta la fecha, el consistorio ha decidido mantener abierta la piscina del enclave hasta el 15 de octubre. Y es que, según reveló el primer edil, “hay clubes deportivos que nos han pedido entrenar en este espacio con trajes de neopreno y consideramos que de esta manera descongestionaremos a la otra piscina”, señaló.
La intención, cara al próximo año, es reabrir el complejo “para primavera y así alargar su temporada, ya que este año la inauguramos ya en agosto”. “Confiamos en que en abril o mayo ambas instalaciones estén operativas y puedan proporcionar una oferta muy variada a los vecinos”, dijo.
Una de las medidas que se adoptó para atraer a nuevos adjudicatarios fue la rebaja del canon anual, que pasaría de los 110.000 euros a los 45.000. El restaurante está en un paraje incomparable, a orillas del río Millars. H
