“Queremos ser papás”. Es el deseo del vila-realense Daniel Delmás y su pareja, Álex Soriano, que ven en la gestación subrogada, popularmente conocida como vientre de alquiler, la opción más viable para tener un hijo. “La adopción es una vía complicadísima para cualquier pareja heterosexual, y más para una homosexual como nosotros”, reconoce. “A los rigurosos requisitos que piden se suma el tiempo, ya que el proceso se puede dilatar durante años”, asegura.

Por ello, se están casi doctorando en la gestación subrogada para poder ser padres a través de ella. Están todavía al comienzo del proceso, que suele durar un año, y están estudiando las opciones que les ofrecen los países donde esta práctica está legalizada. Barajan iniciar el proceso en Estados Unidos, Rusia o Canadá. La norteamericana es la opción que más les atrae en principio, pero también la más cara, “unos 120.000 dólares”. “Económicamente nos sería más viable Rusia, con un coste de unos 60.000 euros, aunque tenemos miedo de que, una vez iniciado el proceso, no se pueda terminar por el trato que dan en el país a los homosexuales”, reconoce Daniel. “Hay que valorar todos los riesgos y en ello estamos”.

Daniel y Álex representan a muchos otros ciudadanos, homosexuales y heterosexuales, que quieren ser padres o madres a través de esta técnica de reproducción asistida y tienen que salir del país para conseguirlo.

Así, se han sumado a la lucha de otras personas agrupadas en la Asociación por la Gestación Subrogada en España, e impulsarán la recogida de firmas en la provincia para poder presentar una Iniciativa Legislativa Popular que se debata en el Congreso de los Diputados. Hoy por hoy están buscando a voluntarios para poder encargarse de buscar las rúbricas.

LA TÉCNICA // La gestación subrogada o gestación por sustitución es una forma de reproducción asistida en la que, además de los futuros padres, participa una mujer que gesta el embrión. Este puede ser el resultado de una inseminación artificial o de una fecundación in Vitro. Son muy conocidos los casos de Miguel Bosé y Ricky Martín, que han sido padres con esta técnica. H