El alcalde de Vila-real, José Benlloch, garantiza a los vecinos la continuidad del jardín Botànic Calduch --ubicado frente al colegio del mismo nombre-- pese a que el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Castellón falló que debía devolverse la propiedad a su dueño, al declarar nula la ocupación directa que realizó en el 2010 el equipo de gobierno liderado por el popular Juan José Rubert para ejecutar el área de ocio en cuestión.

Y es que Benlloch retomó ayer la campaña L’Alcalde al Barri en la zona del Botànic Calduch y, en el marco de la misma, informó que se distribuirán entre los ciudadanos copias de la sentencia que, como dijo recientemente, está pendiente de un recurso, aunque aseveró que están en contacto con los representantes legales del propietario del solar para llegar a un acuerdo económico.

«No estamos en contra de que el damnificado reclame que se le devuelva el terreno, porque tiene todo el derecho del mundo, de forma que el único debate está en la cantidad a pagar», explicó el munícipe. Y matizó que «los seis millones de euros que pedía inicialmente llevarían al Ayuntamiento a un aumento importante del endeudamiento, que generaría problemas con el Gobierno central, y obligaría a aumentar los impuestos y despedir funcionarios». «Y a eso no estamos dispuestos».

NEGOCIACIÓN

Benlloch se mostró convencido de que llegarán «a un acuerdo con la familia que no suponga una ruina para la ciudad». «Por ello, estamos dispuestos a hacer un esfuerzo y alcanzar un convenio para abonar una cifra más acorde con la realidad actual». Al respecto, recordó que «este equipo de gobierno sí que llegó a consensuar la compra del solar anexo, de una superficie muy similar a la del que ocupa el jardín, por 900.000 euros a abonar en cuatro ejercicios».

En esta línea, el munícipe dijo apostar por conveniar un valor a medio camino entre esta cifra y los seis millones que reclama el propietario del espacio motivo del litigio. «No podemos vallar un parque que es imprescindible para este barrio y en el que el consistorio lleva invertido mucho dinero», aseveró Benlloch.

Por su parte, la edila Marisa Mezquita (PP) acusó al alcalde de dar informaciones «sesgadas y algo manipuladas». Y justificó la acción llevada a cabo en el 2010 por el PP, pues «fue el ejecutivo popular el que gestionó esta zona verde que marcaba el PGOU que aprobó el PSOE en 1993».