Un 79% de los conflictos en que las partes implicadas se han sometido al arbitraje de la Unidad de Mediación de la Policía Local de Vila-real han acabado con acuerdo y de manera positiva. Así lo desvelaron ayer la concejala de Seguridad Ciudadana, Silvia Gómez; el comisario principal, José Ramón Nieto; y la inspectora responsable de este departamento policial, Rosana Gallardo, durante su comparecencia para desgranar el balance de las 304 peticiones de intervención -en torno a un 10% más que en el 2028- registradas durante el 2019.

Con todo, uno de los datos más destacables de la estadística del pasado año es el que recoge que el 96% de las personas que participaron en la mediación --una alternativa que se ofrece siempre de forma voluntaria, con el fin de resolver conflictos de forma pacífica y sin necesidad de acudir a los tribunales-- están satisfechas de la intermediación, independientemente de si se solucionó o no la problemática.

La cifra de casos abordados en el 2019 supone un ligero repunte respecto a años anteriores, en los que la media de peticiones rondaba las 280 anuales. «Pensamos que ello se debe a que la ciudadanía va conociendo el servicio y confiando en la Policía Local», explicó la inspectora Gallardo.

CASUÍSTICA // La gran mayoría de los asuntos tratados --un 87%-- corresponden a los ámbitos comunitario --propio de la convivencia en el núcleo urbano-- y rural. Gallardo señaló que en el marco del primero de ellos se abordan básicamente disputas por alquileres, estafas, ocupación de inmuebles, insalubridad, tenencia de animales, ruidos, molestias de peñas, amenazas y filtraciones de agua, entre otros. Mientras, en materia rural las pugnas se centran en cuestiones como los lindes de parcelas, vertidos, daños en propiedades, falta de limpieza de fincas o derechos de riego.

La propia Gallardo incidió en el bajo porcentaje de insatisfacción en los procesos, que únicamente es del 4% y que, «la mayoría de las veces no se corresponde con la falta de acuerdo, sino con que algunos usuarios desearían que la Policía Local diera la solución a su controversia pero, precisamente, el objetivo de la mediación es que sean las personas implicadas quienes lo resuelvan».

El servicio también atendió el pasado año seis casos derivados por los juzgados de Vila-real. En solo uno de los enfrentamientos las partes decidieron buscar un acuerdo y tuvo un final feliz.

Buena cuenta del éxito de la apuesta de la Policía Local de Vila-real por la mediación --la ciudad fue pionera en la creación de una unidad específica en el 2004 y es un auténtico referente a nivel mundial-- es que, a lo largo del 2019, un total de 252 policías de diferentes comunidades autónomas han recibido formación en esta materia en la Escuela de Formación del cuerpo local.