El alcalde de Vila-real, José Benlloch, acudió ayer al juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de la ciudad para prestar declaración en el marco de las diligencias previas abiertas a raíz de la denuncia que presentó el pasado mes de octubre contra dos usuarios de Facebook por realizar comentarios amenazantes contra el alcalde en esa red social, tras la decisión del equipo de gobierno de incrementar el impuesto de bienes inmuebles (IBI) en el 2020.

El juzgado había citado a declarar tanto al primer edil como a los dos denunciados, con el fin de proseguir con el procedimiento por la posible comisión de un delito de injurias por parte de los dos jóvenes, pero finalmente, tras pedirle ambos disculpas y manifestar su arrepentimiento por los comentarios vertidos, el alcalde les ha concedido su perdón, por lo que el paso siguiente sería el archivo de las diligencias.

A raíz de la denuncia presentada por el alcalde el pasado octubre ante la Policía Nacional por los comentarios realizados por estas dos personas, el juzgado abrió diligencias previas para investigar si los hechos eran constitutivos de un delito de injurias. Durante los últimos meses, el alcalde ha tenido contacto tanto con los denunciados como con sus abogados y, en todo momento, les ha manifestado su voluntad de llegar a un acuerdo «si eran capaces de ver la entidad de sus faltas y los efectos tan negativos de su actitud».

Benlloch aseguró: «Todos somos humanos y podemos cometer errores, pero tienen que entender el daño que hacen a la convivencia y a ellos mismos». «Las redes sociales son interesantes y positivas para muchas cosas, pero mal utilizadas pueden generar perjuicios importantes a nivel personal, pero también en el aspecto social», puntualizó.

«BUENA VOLUNTAD» // Al respecto, Benlloch incidió en que «ambos han manifestado arrepentimiento y buena voluntad, y han publicado en sus redes sociales sus disculpas». El munícipe recogió el guante y les disculpó.

Con todo, el primer edil vila-realense lamentó de nuevo este tipo de acciones y reiteró: «Como cargo público acepto la crítica, pero no puedo tolerar esta clase de actitudes de amenaza ni que se sobrepasen los límites con la comisión de posibles delitos».

Finalmente, Benlloch explicó que se ha puesto a disposición de estas dos personas «en caso de que necesiten realizar cualquier consulta o resolver sus dudas sobre la gestión municipal». E incidió en que «el Ayuntamiento es de todos» y están «para ayudar, escuchar y atender a la ciudadanía», pero no pueden «permitir que la discrepancia se manifieste de estas maneras, con amenazas».