Vila-real tendrá para finales de año su propia estación de autobuses, que estará ubicada frente a la terminal de trenes, en la avenida França. Al menos, eso espera el concejal de Territorio, Emilio Obiol, una vez están a punto de arrancar las obras de mejora del párking del recinto ferroviario, en las que Renfe invertirá en torno a 170.000 euros para optimizar las plazas de estacionamiento, sanear el arbolado, adecuar la señalización interior e instalar un alumbrado más eficiente.

Una vez concluidos esos trabajos (estiman en dos o tres meses) y en cuanto el consistorio tenga asignada en firme la partida presupuestaria correspondiente, arrancarán las labores para crear un intercambiador de transportes, con el objetivo de convertirlo en el punto de llegada y salida de los autobuses que operan en la ciudad, tanto el urbano y gratuito del Groguet como los de línea que conectan con otros municipios.

El proyecto de intercambiador de transportes, en el que viene trabajando el departamento que encabeza Obiol y que adelantó Mediterráneo hace cinco años, incluye el derribo del muro que ahora separa el recinto ferroviario de la vía pública y habilitar una pequeña plazoleta para facilitar la espera de los viajeros, así como el espacio necesario para que puedan estacionar, al menos, tres autobuses.

"La intervención mejorará y dignificará la ciudad y será un punto de referencia, por cuanto la estación de trenes es una puerta de entrada y de salida del municipio"

El consistorio ha presupuestado 225.000 euros para ejecutar un proyecto que, como asevera el edil Obiol, «mejorará y dignificará la ciudad y será un punto de referencia, por cuanto la estación de trenes es una puerta de entrada y de salida del municipio, es el lugar al que van las personas que apuestan por la movilidad sostenible».

Punto de referencia

La actuación a llevar a cabo por el Ayuntamiento permitirá habilitar espacio con capacidad para, al menos, tres autobuses. GABRIEL UTIEL

El concejal explica que «será una estación de autobuses modesta y humilde, pero servirá para que todas las líneas puedan tenerla como punto de referencia y, además, se completará con parada para taxis y estacionamientos para bicis», detalla. Y añade que «será moderna, pero dispondrá de buena dotaciones, al habilitar una pequeña plazoleta como punto de espera y de paso para los usuarios de ambos transportes públicos», puntualiza.

Obiol destaca que se trata de una obra que el ejecutivo local que lidera el alcalde, José Benlloch, tiene en agenda desde hace varios años, «pero que no se podía realizar por la situación económica del consistorio como consecuencia de los empastres del PP en materia urbanística», subraya. 

El edil considera que, con el objetivo de optimizar los recursos, «es tiempo de buscar gestiones y presupuestos compartidos con otras administraciones», en referencia a la coordinación de dos iniciativas que desembocarán en la generación de un espacio único que beneficia a la ciudad.

Cambios viarios

La Policía Local de Vila-real advierte en su perfil de que las obrasen el párking de la estación afectarán a la avenida França.

La intervención proyectada, especialmente en lo que respecta al Ayuntamiento, obligará a llevar a cabo algunos cambios que afectarán al tráfico rodado en la zona. Eliminarán uno de los carriles en sentido norte, que habilitarán para el acceso de los autobuses y facilitar la salida de los coches que estacionen en el párking de la estación de trenes.

De hecho, la Policía Local de Vila-real informa, a través de su página en Facebook, del inicio de las obras de adecuación de la zona de aparcamiento de la estación de trenes de la ciudad. Un proyecto al que seguirá el derribo del muro que separa este espacio de la avenida França. Unos trabajos que obligan a eliminar uno de los carriles de este vial en sentido norte, como se aprecia en la imagen.

Además, para reducir el impacto visual de un grupo de casas en mal estado junto a la terminal, colocarán un toldo decorativo que ocultará las fachadas de las mismas, similar al que se utiliza para cubrir edificios en obras.

Asignaturas pendientes del Gobierno central

El Ayuntamiento quiere sustituir la pasarela metálica elevada por un paso subterráneo entre andenes.

La mejora del recinto de aparcamiento de la estación de ferrocarril de Vila-real es solo una actuación más que acometerá Renfe, en el plan que incluye la adecuación de párkings de otras terminales, como en la de Burriana-les Alqueries. Sin embargo, Renfe y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) continúan teniendo asignaturas pendientes desde hace años con Vila-real

Y es que el Ayuntamiento, como expresa el concejal de Territorio, Emilio Obiol, considera que las obras a acometer, pese a su importancia, «tienen un carácter menor», por cuanto «siempre hay que tener en cuenta que el tratamiento integral de la estación de Vila-real todavía está por llegar y tiene que traducirse en la eliminación de la pasarela diabólica que se construyó para salvar las vías y la construcción de un paso inferior entre arcenes, incluidos los ascensores».