El Ayuntamiento de Vila-real, a través de la Concejalía de Seguridad Ciudadana, reforzará las medidas disuasorias de velocidad en algunos viales de la partida Madrigal. Así lo explicó la edila delegada del área, Silvia Gómez, quien señaló que la actuación responde a las denuncias realizadas por vecinos de la zona, un área «sensible» en la que el gobierno local ya había puesto el foco.

Así, en el plazo de un mes y medio aproximadamente, el consistorio instalará en algunas vías de esta área de la ciudad resaltes en la calzada, así como radares pedagógicos para conseguir que aquellos conductores que circulan a velocidades excesivas para este tipo de vías cumplan con la normativa. La actuación, indicó la responsable municipal, «se hará gracias al contrato de señalética que adjudicamos el pasado noviembre».

La problemática está, especialmente, en calles como Monestir del Puig o Atrevits, en las que, según la concejala, han llevado a cabo controles de velocidad dentro de las campañas que realiza la Policía Local, en colaboración con la DGT. Unos controles que habrían corroborado las quejas de los vecinos. Respecto a la posibilidad, también valorada, de instalar radares fijos, la titular de Seguridad Ciudadana dijo que «casi ninguna o ninguna Policía Local tiene» de este tipo y siempre que lo han trasladado, «desde la jefatura indican que no es adecuado», comenta.

Limitación de la velocidad a partir del 11 de mayo

Además, a partir del 11 de mayo entra en vigor la reforma de los límites de velocidad en ciudad. Así, explicó Gómez, en las vías con un único carril por sentido de circulación --como es el caso de las anteriormente citadas-- el máximo será de 30 kilómetros por hora, por lo que instalarán paletas.

Gómez indica que los reductores se solicitaron hace un tiempo y aunque pueden tardar en llegar, también han priorizado «instalarlos primero en los entornos de los centros educativos». La medida llegará a otras calles «en bolsa».

Área muy concurrida

Aunque estas calles siempre han solido estar muy frecuentadas por deportistas, ya sean corredores o ciclistas, o personas que salen a pasear, lo cierto es que la pandemia y algunas restricciones como el cierre perimetral de Vila-real durante varios fines de semana hizo que el flujo de usuarios ascendiera considerablemente. Además, no son pocas las construcciones de viviendas que se están acometiendo en este entorno de la localidad, por lo que a los vecinos que ya residen allí de forma continua se sumarán más en unos meses.

Una situación, esta del auge de usuarios de la partida Madrigal, que llevó a que Compromís elevara al pleno una moción sobre la seguridad en esta área de Vila-real.

Con todo, la portavoz de la formación, Maria Fajardo, explicó en la sesión ordinaria del pasado abril que retiraban la propuesta del debate tras haber sido informada por la edila Gómez y el máximo responsable de Policía Local de las acciones previstas.

Radares también en cinco grandes avenidas

Vila-real también instalará radares pedagógicos en las cinco grandes avenidas de la ciudad con doble carril por sentido, para analizar el flujo de vehículos diario y la velocidad media de circulación. Los viales en cuestión son Francisco Tárrega, Alemania, Italia, Europa y Bélgica. La colocación de los medidores correrá a cargo de la empresa adjudicataria del nuevo contrato de mantenimiento de la señalética de tráfico, que incluye esta posibilidad como una mejora.

Otra medida que el Ayuntamiento está implementando en materia de seguridad vial es la instalación de reductores de velocidad y los llamados cojines berlineses, sistema utilizado para que los conductores rebajen la velocidad en determinadas zonas (ya están en la avenida Tárrega y calle Michalovce).