El Ayuntamiento de Vila-real, a través del departamento de Servicios Públicos, habilitará una jornada a la semana --los viernes-- para recoger, a petición de los vecinos, los aparatos domésticos que quieran desechar definitivamente.

El objetivo no es otro que, como explica el concejal del área, Francisco Valverde, «facilitar este servicio al vecindario para que no tengan que ir a propósito al ecoparque, que es el lugar en el que tienen que depositarse este tipo de elementos habituales en los domicilios de la ciudad».

Y es que el edil hace hincapié en que se ha convertido en habitual que, pese a estar expresamente prohibido, algunos residentes aprovechen para abandonar electrodomésticos inservibles junto a los contenedores de basura o de recogida selectiva, «lo que obliga al consistorio a redoblar esfuerzos para retirar estos aparatos, con el consiguiente gasto extra que tiene que afrontar el municipio.

Soluciones

Como asevera el concejal Valverde, «no podemos quedarnos únicamente en que esta práctica, habitual en ciertos puntos de la ciudad, está prohibida y es sancionable, sino que desde el Ayuntamiento tenemos que habilitar mecanismos par que los vecinos puedan pedir que, como ocurre con los voluminosos, pasen por su casa a retirar electrodomésticos viejos, de manera que ya no habrá excusa para incumplir la normativa municipal».

El edil recuerda que la retirada de voluminosos puerta a puerta y bajo petición de los vecinos está operativo los martes y los viernes. Para ello hay que pedir el servicio llamando al teléfono 964 536 761, correspondiente a Fobesa. Con todo, Valverde hace hincapié en que, de forma extraordinaria se repasa toda la ciudad, «aunque siempre se da preferencia a aquellos ciudadanos que lo solicitan».

«Lo más escandaloso se produce cuando se realiza la limpieza de viviendas, de manera que aparecen junto a los contenedores toda clase de muebles deteriorados y rotos. Y en cantidad y frecuencia de abandono les siguen los colchones, que vienen a retirarse entre 30 y 50 a la semana; mientras tanto, hay un goteo continuo de frigoríficos, termos o televisores, e incluso de escombros de obras menores», señala el concejal.