El 18 de noviembre de 2011, el Ministerio de Ciencia e Innovación concedía a Vila-real el título de Ciudad de la Ciencia y la Innovación, un reconocimiento creado apenas un año antes para premiar a aquellos ayuntamientos españoles que estaban trabajando para potenciar el conocimiento y la innovación para favorecer la transición a un modelo económico sostenible. Vila-real se convertía así en la primera ciudad de la provincia y una de las primeras de España en obtener la marca de Ciudad de la Ciencia y la Innovación e integrar el selecto club de ciudades innovadoras de España, reunidas en el red Innpulso. 

Comenzaba así un camino que ha llevado a Vila-real a referenciarse como líder en el impulso al conocimiento y la innovación como base del modelo productivo que 10 años después sigue avanzando. Esta misma semana, el Ministerio de Ciencia e Innovación ha revalidado la marca de Ciudad de la Innovación para Vila-real que supera el examen por tercera vez.

"Hemos logrado que incorporar la cultura de la innovación en nuestro tejido socioeconómico, gracias a la alianza con la sociedad que venimos consolidando en la última década"

José Benlloch - Alcalde de Vila-real

«Cuando hace 10 años emprendimos el camino por un cambio de modelo productivo basado en el conocimiento y la innovación, inmersos como estábamos en una crisis económica y financiera brutal que nos llegó a situar en casi un 25% de paro, pocos apostaban por el éxito de este modelo. Hoy, Vila-real no sólo ha revalidado la marca por tercera vez consecutiva, cosa que demuestra que hemos estado haciendo bien las cosas, sino, sobre todo, hemos logrado que incorporar la cultura de la innovación en nuestro tejido socioeconómico, gracias a la alianza con la sociedad que venimos consolidando en la última década», valora el alcalde, José Benlloch, presidente también de la Xarxa Valenciana de Ciutats de la Innovació que Vila-real contribuyó a constituir en el año 2017. Diez años después, el cambio de modelo, la atracción de nuevas inversiones y las políticas de empleo, entre otros factores, han colocado a Vila-real como población de más de 40.000 habitantes de la Comunitat Valenciana con menos paro, incluso después del azote de la pandemia, que ha incrementado sensiblemente la tasa de desempleo tras haberse situado por debajo del 13%. 

En el balance de esta década de liderazgo en el ámbito de la innovación destacan todo tipo de acciones: desde el apoyo a los agentes innovadores y el talento local hasta el fomento de la innovación, la tecnología y el emprendimiento en el ámbito educativo, con las empresas innovadoras del ámbito de influencia local e incluso internacionales o el impulso de soluciones urbanas innovadoras para mejorar la calidad de vida en la ciudad sin olvidar las alianzas forjadas con la universidad. 

Sede de tres campus

No en vano, Vila-real puede congratularse de ser sede de tres campus: la Universidad a Distancia (UNED) y más recientemente la Universitat Jaume I de Castelló (UJI) y la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). Tal como refleja la memoria que la ciudad presentó para la renovación de la marca, el esfuerzo en materia de innovación en un ejercicio (2019) supuso en torno al 95% del capítulo 6 (inversiones) y cerca de 500.000 euros en convenios con entidades y agentes de innovación, en el marco de la alianza con la sociedad vila-realense. 

«La Feria Destaca, la creación de las cátedras y de la sede de la UJI en Vila-real que nos llevó a convivir por primera vez con la Universitat Jaume I, el convenio con Huawei o con empresas punteras en el ámbito tecnológico como IoTSens o Telefónica para la aplicación de soluciones innovadoras en el ámbito urbano o nuestra alianza con la empresa local, ayudándola y apoyándola en la aplicación de nuevos productos para mejorar nuestro entorno urbano como la resina antiorines desarrollada por Ultraprotek son algunos ejemplos del balance que nos dejan estos 10 años», valora el munícipe.

Benlloch recuerda también que nada de lo logrado habría sido posible sin la concitación de los agentes locales de la innovación, en particular la Fundación Globalis, creada en 2011 precisamente para favorecer el ecosistema de la innovación local. «Queda mucho camino todavía por recorrer», puntualiza. Entre los proyectos para el próximo trienio, como recoge la memoria de la candidatura, destaca la creación de la Agencia Local de la Innovación, en la que ya está trabajando el consistorio sobre las cuatro patas del sistema innovador local: la Cámara de Comercio, la Cátedra de Innovación Cerámica Ciutat de Vila-real de la UJI, la Fundación Globalis y la Fundació Caixa Rural (Efecte Vila-real). 

«Sin estos cuatro pilares, todo el camino recorrido hasta ahora no habría sido posible. Y serán fundamentales para seguir avanzando en la consolidación de este sistema de la innovación, ahora que hemos obtenido por tercera vez la marca que nos acredita como ciudad innovadora», detalla. 

Retos de futuro

La lucha contra la brecha digital, el desarrollo de una herramienta tecnológica para monitorizar los hábitos alimentarios de la población, de la mano del Centro Mundial de València para la Alimentación Urbana Sostenible (CEMAS) y la FAO de Naciones Unidas, o el fomento de la compra pública innovadora y la eficiencia energética son otros de los retos de innovación que se ha marcado Vila-real para el próximo trienio.

«Hemos pasado de una ciudad industrial y labradora a una industrial, labradora y de servicios, innovadora, inclusiva y sostenible. Así, avanzamos hacia la Vila-real del 2030»

José Benlloch - Alcalde de Vila-real

«Y, por supuesto, seguir consolidando acciones en las que hemos trabajado en estos años y que tan buenas frutos nos están dando, como la feria Destaca y Destaca en Ruta, los premios innovadores de Globalis, el fomento de la innovación educativa y en el entorno escolar como vivimos la semana pasada con la primera competición nacional de robótica virtual de la mano de Amazon», agrega Benlloch que también da las gracias a empresas, instituciones, medios de comunicación, universidades y entidades que respaldaron, con 226 cartas de apoyo, la propuesta local. «Una de las mayores muestras de apoyo a una candidatura a Ciudad de la Ciencia y la Innovación», puntualiza. 

«Hemos pasado de una ciudad industrial y labradora a una industrial, labradora y de servicios, innovadora, inclusiva y sostenible. Así, avanzamos hacia la Vila-real del 2030», concluye Benlloch.