El Ayuntamiento de Vila-real inicia la reincorporación progresiva al trabajo presencial del personal municipal en situación de teletrabajo. Por ello, además de la adquisición de material de protección para el personal, con la compra de mascarillas por valor de 35.000 euros que garantiza un lote de 340.000 mascarillas quirúrgicas y otro de 47.000 mascarillas FFP2, el consistorio aprobó en el último pleno la consignación económica para adaptar instalaciones municipales como la planta baja del Gran Casino para el traslado del servicio de Atención y Trámites (122.575 euros) o la reforma de los antiguos juzgados para ubicar las dependencias de la Concejalía de Economía y la Tesorería municipal (489.152 euros), actuación que se espera iniciar este año para reubicar unos departamentos que «actualmente se encuentran en emplazamientos que no reúnen las condiciones más idóneas para la prestación de servicios», señalan desde el consistorio.
El objetivo de estas inversiones es dotar de unas mejores condiciones de trabajo al personal, y garantizar el cumplimiento de las medidas de prevención sanitaria por la pandemia del coronavirus cuando todos funcionarios retornen al trabajo presencial de manera definitiva, pero también de garantizar una mayor calidad en la atención a la ciudadanía, apunta el alcalde, José Benlloch.
Teletrabajo, también si se puede
En una reciente reunión de coordinación del equipo de gobierno, el primer edil dio instrucciones a los concejales de las diferentes áreas para que, ante la velocidad de la desescalada, los departamentos fueran incorporando paulatinamente, con prudencia y responsabilidad, a los funcionarios que seguían teletrabajando a sus puestos físicos en el consistorio.
"Estamos en puertas del verano y, aunque con la vacunación y el gran esfuerzo en cumplir las restricciones, la evolución de la pandemia es favorable, no debemos confiarnos. Iremos paso a paso garantizando la seguridad sanitaria de funcionarios y vecinos"
El alcalde explica que, en los casos en los que sea viable, se mantendrá el teletrabajo dos días a la semana, mientras que los tres días restantes, los empleados municipales desempeñarán sus funciones de manera presencial. «Estamos en puertas del verano y, aunque gracias a la vacunación y al gran esfuerzo en cumplir las restricciones la evolución de la pandemia es favorable, no debemos confiarnos y vamos a ir paso a paso y siempre garantizando la seguridad sanitaria tanto del funcionariado como de la ciudadanía que acude al ayuntamiento a realizar gestiones», subraya Benlloch.
Así las cosas, el consistorio está adoptando las correspondientes medidas tanto de reestructuración de espacios para garantizar el cumplimiento de los protocolos anticovid-19 en los puestos de trabajo como de dotación de material de protección para el personal municipal ya que previsiblemente el uso de mascarilla en interiores se extenderá bastante tiempo.
