La Comunitat de Regants de Vila-real acomete durante estos días unas obras de accesibilidad a su sede, un emblemático inmueble que data del siglo XIX, para que cualquier persona pueda entrar a su sala de actos. Y es que como indican desde la entidad en Facebook, «no solo hacemos reuniones, también es un espacio para el uso de la ciudad como, por ejemplo, durante las exposiciones».

Así, las actuaciones que se están realizando consisten en adaptar la entrada --únicamente había escaleras--, instalar un nuevo baño y adecuar la iluminación. Unas labores que llegan tras la restauración de las pinturas, encargadas a Joan Bosch i Pons en 1913 que, con motivos y alegorías relacionados con las aguas, la agricultura y la tierra, decoran 653 m² de techos y paredes. El paso del tiempo y las filtraciones degradaron los murales, lo que obligó a acometer una importante intervención.

El consistorio, entre otras instituciones, decidió apoyar este proyecto con un convenio de 120.000 euros a aportar en tres anualidades --40.000 por ejercicio hasta el 2023-- con el objetivo de «poner en valor este destacado recurso patrimonial de la localidad».

La Comunitat de Regants, que en el 2019 celebró su 150° aniversario y es Medalla de Oro de la ciudad, aglutina a unos 5.000 comuneros con tierras de cultivo en Vila-real, les Alqueries y Burriana.