Vila-real fomentará el uso de las energías renovables con la instalación de placas solares en 11 colegios de la ciudad. En concreto, los centros que contarán con paneles fotovoltaicos a corto plazo son Pío XII, Pascual Nácher, José Soriano, Concepción Arenal (tanto en el edificio de Infantil como en el de Primaria), Gimeno Barón, Cervantes II, Botànic Calduch y Angelina Abad, además del centro de educación especial La Panderola y la escuela municipal infantil El Solet.
Las placas, que tendrán una potencia de 277 kW, permitirán dejar de consumir 569.229 kW al año, lo que «no solo supondrá un ahorro económico en la factura que paga el Ayuntamiento, sino también un avance hacia el autoabastecimiento y, sobre todo, hará menos necesarias algunas grandes infraestructuras para la canalización de la energía eléctrica que tienen un gran impacto ambiental en el territorio», especificó el concejal de Sostenibilidad, José Ramón Ventura Chalmeta.
El objetivo: antes del verano
"El alumnado podrá monitorizar el consumo y saber cómo afectan sus acciones a la hora de reducirlo"
Hace medio año, cuando el Ayuntamiento estudió el impacto que supondría para el consistorio, estipuló que la inversión podría amortizarse en cinco o seis años, pero ahora, con el coste de la luz en continuo aumento, «ese plazo se habrá acortado». Asimismo, concretó que el objetivo municipal es que antes de verano hayan completado el montaje de las placas, mientras que el concejal de Servicios Públicos, Xus Madrigal, aseguró que las labores no interferirán en el desarrollo de las clases, aunque será un asunto que abordarán con los responsables de los centros.
Más allá de los beneficios económicos y medioambientales, Ventura Chalmeta se mostró convencido de que este tipo de instalaciones también pueden tener ventajas para el ámbito educativo, ya que el alumnado «podrá monitorizar el consumo y saber cómo afectan sus acciones a la hora de reducirlo y así favorecer un ahorro económico o conocer de primera mano cómo se transforma la energía solar en eléctrica y quizá sirva para despertar conciencias ecológicas y científicas».
Presupuesto de 298.000 €
"Este proyecto supondrá un ahorro energético y que va en la línea de la Vila-real del siglo XXI, más verde y respetuosa con el medio ambiente"
El proyecto cuenta con un presupuesto que ronda los 298.000 euros, de los que el consistorio aportará 22.234 y el resto, 276.000, vendrán a través del Ivace. Según Madrigal, 138.000 euros son a fondo perdido y otros tantos deberán devolverlos a la entidad autonómica en un plazo de cuatro años, a modo de préstamo, pero sin ningún tipo de interés.
«Este plan es un ejemplo más de la colaboración entre administraciones que supondrá un ahorro energético y que va en la línea de la Vila-real del siglo XXI, más verde y respetuosa con el medio ambiente», destacó Madrigal, quien incidió: «A pesar de la complicada situación económica del Ayuntamiento, no estamos parados y seguimos aprovechando las oportunidades de colaboración y de obtención de subvenciones».
