Suma y sigue. El calvario de sentencias urbanísticas derivadas de la ocupación de terrenos para realizar infraestructuras durante el periodo del último gobierno del PP en Vila-real, liderado por el exalcalde Juan José Rubert, continúa generando serios dolores de cabeza al actual ejecutivo liderado por el socialista José Benlloch.
Y es que a pocos días de acabar el año y cuando el equipo de Benlloch estaba cerrando el documento de las cuentas del 2022, nuevas resoluciones judiciales en firme obligan a recalcular el presupuesto, con la consiguiente demora en su aprobación.
Es una situación calcada a la que se vivió hace ahora un año, cuando 11 expedientes del Jurado de Expropiación y un fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat (TSJCV), paralizaron las cuentas del 2021, ya cerradas, a la vez que se tuvo que recurrir a la contratación de un préstamo.
Los detalles
Ahora llega un conjunto de resoluciones que suman 840.000 euros. La mayor es la correspondiente a una parcela ocupada en su día para dar forma al jardín Jaume I, de 807. 970 euros.
«La inclusión de estas cantidades en los presupuestos del 2022 nos obliga a modificar nuevamente nuestras previsiones», explica el alcalde Benlloch. Unas previsiones que, como asegura, incluso eran menores que las del 2021, aun con el incremento en un 5% del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). «Pese a la actualización de la contribución con arreglo al IPC, el Ayuntamiento no tiene margen económico para afrontar más pagos urbanísticos como este si queremos seguir prestando los servicios que la ciudadanía merece», señala el munícipe vila-realense.
Ampliación de servicios
Y añade que se trata de unas prestaciones «que no hemos dejado de ampliar en los últimos años, con el objetivo de mejorar las oportunidades, la atención a las personas y la calidad de vida, para que Vila-real no pierda el tren».
En este sentido, el primer edil avanza que, para no realizar recortes en un presupuesto ya de por sí ajustado «no tenemos otra opción que hacer frente a este nuevo pago vía préstamo, que incrementará la cifra global de las cuentas del próximo ejercicio».
Respecto al expediente por el jardín Jaume I, el abono de 807.970 euros corresponde a la cantidad pendiente tras pagar, en diciembre del 2019, los 340.574 euros de la valoración municipal de los terrenos cedidos en el 2010 para ejecutar el espacio verde. Al respecto, y en sentencia de junio del 2021, el tribunal estimó el valor del solar ocupado en 1.148.544 euros, algo más de la mitad de la cifra que exigían los propietarios y que era de 2.062.727 euros.
