Los técnicos del Ayuntamiento de Vila-real han propuesta a la empresa Becsa para que acometa el acondicionamiento de la parcela de 3.717 m² ubicada en la esquina de las calles Corts Valencianes y Enric Valor, con el objetivo de dar continuidad al actual jardín del Botànic Calduch, construido en la última etapa del gobierno del PP, con Juan José Rubert como alcalde, sobre un solar que se ocupó para crear la zona verde y que ya arrastra varias sentencias en contra del Ayuntamiento.
No es el caso de la intervención que se propone para el solar contiguo, adquirido por el consistorio en el 2015 por un importe de un millón de euros, al que se hizo frente a través de un préstamo.
Tal y como explicó en su día el concejal de Territorio, Emilio Obiol, se plantea un jardín de tipo mediterráneo, con un bajo coste de mantenimiento, así como una zona de parque canino para dar servicio a los propietarios de mascotas de esta zona de la ciudad.
El área ajardinada se integrará con la zona verde ya urbanizada, con la ejecución de este plan de acondicionamiento que salió a licitación por 126.000 euros y un plazo de ejecución de tres meses.
Olivos, falsos pimientos, moreras, árboles botella o lledoners son las especies vegetales de mayor porte que se plantarán en este espacio y que se acompañarán de romero o lavanda, entre otras.
