Mejorar los accesos, reordenar el tráfico y reforzar la seguridad para los trabajadores y usuarios en general fundamentan el impulso que el Ayuntamiento de Vila-real quiere dar al polígono hortofrutícola de la ciudad, ubicado al este de la estación de trenes, reconvirtiéndolo en un clúster agroalimentario y tecnológico

El objetivo no es otro que mantener la actividad que todavía existe en esta área empresarial y, a su vez, atraer otras mercantiles de ambos sectores para su implantación en esta zona que abarca una superficie total de 156.880 m².

Así lo anunció ayer el alcalde, José Benlloch, tras la visita que realizó al polígono para comprobar el resultado de las obras de mejora que han llevado a cabo allí y que, como apuntó, tendrán continuidad con más fases. Una visita acompañado del concejal de Territorio, Emilio Obiol, y de responsables de las empresas Ingestec, que gestión la asesoría técnica de la oficina de reindustrialización, y de Pavasal, que ha sido la encargada de acometer los trabajos financiados con una subvención de 180.000 euros del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) de la Generalitat.

El alcalde de Vila-real, José Benlloch; y el edil de Territorio, Emilio Obiol, comprobaron in situ el resultado de las obras de mejora del polígono hortofrutícola. MANOLO NEBOT ROCHERA

Precisamente allí, el munícipe vila-realense hizo hincapié en que en esta zona empresarial perduran una cooperativa (la Real Export) y un comercio privado dedicados a la exportación de cítricos, a la vez que recientemente abrió la primera empresa social de la Comunitat dedicada al cultivo del champiñón (Vilamico) creada por la Fundación Manantial.

Con todo, Benlloch apunta que «ya hay otras dos naves alquiladas para mercantiles de importación y exportación de vinos», y avanzó el interés mostrado por compañías tecnológicas y de robótica por instalarse en este polígono.

Proyectos

El alcalde incidió en el hecho de que, en el marco del plan de reindustrialización de Vila-real, han invertido desde el 2018 un total de cuatro millones de euros en ocho proyectos de mejora y modernización de zonas industriales en colaboración con el Ivace, «que también han supuesto una transformación de los accesos a la ciudad». Y añadió: «Las cosas han cambiado y el Vila-real de hace seis años nada tiene que ver con el actual, lo que obliga a redefinir los programas de futuro».

Una redefinición que ha obligado al ejecutivo local a suprimir la previsión de una parte del polígono para construir viviendas, con el fin de hacer frente en parte «a los aprovechamientos urbanísticos derivados de la mala gestión del anterior gobierno del PP» y centrar los esfuerzos en crear un clúster agroalimentario «de éxito y capaz de atraer inversiones». 

El concejal de Territorio de Vila-real, Emilio Obiol, explicó durante la visita al polígono agroalimentario efectuada ayer que las obras acometidas con los 180.000 euros de subvención del Ivace han consistido básicamente en la mejora del alumbrado con tecnología led, así como la adecuación de los accesos a esta área empresarial ubicada al este de la estación de trenes, con la construcción de aceras y la reordenación del tráfico. Asimismo, han instalado una pantalla verde en la calle Dones del Magatzem, han reasfaltado viales y han señalizado también calles de la zona.