Las cofradías de Vila-real preparan con ganas la vuelta de la Semana Santa tras dos años de parón por la pandemia. Es el caso de la Venerable Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Caridad. Desde hace casi dos meses, se reúnen los domingos --día de mayor disponibilidad de los integrantes-- para ensayar giros, levantar los pasos acorde a las marchas y otras acciones para que el porteo a hombros de sus imágenes sea lo más preciso posible.
Así lo explicó el presidente de la entidad religiosa, José Luis Soto, quien apuntó que, pese a no haber podido salir a las calles estos años, la actividad se ha mantenido y este 2022, siempre que las circunstancias finalmente lo permitan, podrán estrenar novedades.
Algunas estaban previstas para el 2020, pero no pudieron mostrarse y otras las han ido realizando estos meses de pandemia «porque no hemos estado parados». Así, por ejemplo, están la Cruz Arbórea para Jesús Nazareno, el juego de varas para la sección de mantillas o el simpecado Mariano para las secciones de la Virgen; también han barnizado todo el paso de Jesús Nazareno y plateado --con pan de plata-- los Ángeles que lo acompañan.
Y en la imagen de la Caridad, han remodelado los palos de carga, niquelado y reparado las ánforas y también serán nuevos los varales y el palio --este a la espera de poder desfilar desde hace dos años, cuando estaba previsto su estreno--. Gracias a algunas de estas modificaciones, la cofradía ha reducido el peso de la plataforma de la Virgen y ambos pasos están en torno a los 600 kilos.
Han formado dos cuadrillas: la de mujeres, con 54 integrantes; y la de hombres, con 50. Son cifras más bajas que en antes del covid-19, pero que han notado también en otros roles como los penitentes.
Por otra parte, las cornetas y tambores del XII Pregón Musical Ciudad de Vila-real anunciarán este fin de semana la entrada de lleno en la programación de Semana Santa, declarada de interés turístico provincial y autonómico.
