Un centenar de bombos y tambores de ocho agrupaciones de la provincia de Castellón han hecho sonar con fuerza sus instrumentos para anunciar la llegada de la Semana Santa a Vila-real, después de tres años sin que esta Fiesta de Interés Turístico Autonómico se pudiera celebrar con normalidad: en el 2019 como consecuencia de las lluvias y en el 2020 y el 2021 por la pandemia del covid-19.

Lo cierto es que el temor al coronavirus sigue afectando a la asistencia de estos colectivos a las convocatorias que se realizan al respecto en los diferentes municipios. Tanto es así que, de las 25 agrupaciones que forman parte de la asociación provincial, solo ocho han optado por recuperar este año la tamborrada.

En concreto, hasta Vila-real han llegado los bombos y tambores de la Cofradía del Santo Sepulcro, de Benicàssim; el Grup de Tambors i Bombos de Betxí; la sección interna de la Cofradía de Santa María Magdalena, de Castelló; la asociación de Jesús Nazareno y la Santa Faz, de la Vall d’Uixó; y las entidades culturales de Tales, Viver y los anfitriones de Vila-real. Además, también se ha contado con la presencia de la banda de la Virgen del Carmen de Sagunt, como invitados de fuera de la provincia.

Recorrido por la ciudad

El jardín de Jaume I ha sido el lugar desde el que, caída la noche, se ha iniciado un desfile que ha recorrido diferentes calles de la ciudad para terminar en la plaza de la Vila, donde han retumbado con fuerza los sonidos de todos los bombos y tambores.

No es el único acto previo a la celebración de la Semana Santa que, oficialmente, arranca mañana con el Domingo de Ramos. Así, en la iglesia arciprestal se ha celebrado la misa en honor a la Virgen de los Dolores; mientras que la basílica de Sant Pasqual acoge un concierto de música sacra que, con el título de Sacred sounds, está a cargo de Il Dolce Incontro. En él, la mezzosoprano Francesca Sales y el sopranista Rafael Quiralt interpretan obras de Vivaldi, Caldara y Scarlatti.

La noche de la 'Pasión' de Vila-real

Por otra parte, todo está preparado para que mañana por la noche, sobre el escenario instalado en la plaza Major de Vila-real, así como en el conjunto del principal ágora de la ciudad, se desarrolle el particular espectáculo de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo que, dirigido por Alfredo Sanz, cuenta con la participación de más de 200 artistas de diferentes disciplinas, tanto musicales como de danza o de teatro de calle. En esta ocasión, Laquima vere, la particular Pasión vila-realense, en la que la tradición se funde con aportaciones muy contemporáneas, estrenará un novedoso sistema de sonido envolvente.