Más de 10 millones de euros invertidos en programas de empleo en los últimos cinco años y con más de 800 personas beneficiarias. Ese es el esfuerzo económico que ha realizado el Ayuntamiento de Vila-real y que puso ayer en valor el alcalde, José Benlloch, para crear oportunidades laborales a pesar de la complicada situación económica, que «ha tenido que hacer frente a las crisis de la deuda y el urbanismo del PP, agravadas por la del covid, y en los últimos meses a la subida de precios y costes energéticos», reivindican desde el consistorio.

El primer edil hizo esta valoración con motivo de la reunión que mantuvo con participantes de los programas Empuju (dirigido a menores de 30 años) y Ecovid (para mayores de 30 que están en paro a causa de la pandemia del covid), que desde diciembre trabajan en diferentes departamentos municipales. El encuentro tuvo como objetivo hacer balance del funcionamiento de estos planes y sobre todo conocer de primera mano la experiencia de los beneficiarios, intercambiar opiniones y propuestas, y detectar los nuevos retos y oportunidades que tiene la administración local en esta etapa de cambios a nivel global.

Otra foto de la reunión de Benlloch con los integrantes de los programas de empleo Ecovid y Empuju. Mediterráneo

El alcalde remarcó que solo la inversión que destinan a estos dos planes, con aportación de la Generalitat, supera los 1,3 millones de euros, con 48 beneficiarios, lo que supone cerca del 10% de la plantilla de personal del Ayuntamiento. 

"53 millones en pagos"

Benlloch hizo hincapié en esa inversión porque recuerda que «la situación económica del Ayuntamiento es muy delicada». «Llevamos 10 años dedicando esfuerzos a hacer frente a dos crisis muy graves, como son las de la deuda y el urbanismo heredados de la etapa del PP, que nos han supuesto el pago de más de 53 millones de euros. Además, en los últimos dos años, la pandemia y la necesidad de inyectar ayudas para paliar sus consecuencias económicas nos ha lastrado también, con cerca de 5 millones», recalcó el alcalde, que añadió: «Por si esto fuera poco, ahora nos encontramos con unos costes energéticos y precios disparados que también nos encarecen los contratos y los suministros básicos que necesita una ciudad de más de 50.000 habitantes». 

El balance del último lustro se traduce en 10.250.750 euros destinados a programas de empleo y un total de 861 beneficiarios entre 2017 y 2021. A esta cifra hay que sumar los planes conseguidos en este 2022, como el paro agrario, el programa de empleo de la Diputación o una nueva edición del programa Empuju, para el que el Ayuntamiento logró una subvención de cerca de 120.000 euros.