La música volvió a sonar este sábado por la noche desde lo alto del campanario de la iglesia arciprestal de Vila-real. Como es tradición desde hace años, aunque la pandemia obligó a suspender o ajustar a los condicionantes sanitarios las últimas ediciones, varias decenas de integrantes de la Unió Musical La Lira se encaramaron a la torre para ofrecer el concierto de la antevíspera de Sant Jaume, que la formación recuperó en el año 2000 tras décadas sin que esta actividad se organizara en la ciudad.

Llegar a este peculiar escenario no es tarea sencilla. Cargados con sus instrumentos y otros enseres necesarios para la actuación y valiéndose de diferentes recursos para iluminar el ascenso, los músicos completaron la subida de los más de 170 escalones que hay.

Los toques de campana no faltaron desde lo alto de la arciprestal. Gabriel Utiel

El acto arrancó cerca de las 22.30 horas, con el tradicional toque del Avemaría, y siguió con el concierto de La Lira en honor al santo que da nombre a la iglesia arciprestal. Se trata de una actuación en la que los toques de campanas se alternan con la música de la banda, que ofreció un variado repertorio. La música pudo escucharse desde múltiples puntos de la ciudad y, según algunos vecinos, si el viento es favorable, puede llegar a escucharse incluso en la zona del Termet, que dista varios kilómetros.

La concejala de Tradiciones, Noelia Samblás, destacó que están «satisfechos» por «poder volver a celebrar con normalidad una de las tradiciones más arraigadas y más especiales por su singularidad» en la ciudad.