Como un auténtico castigo está viviendo el presidente de Conquistando Escalones, el vila-realense Abrahán Guirao, sus serias dificultades para encontrar un taxi adaptado que cubra sus desplazamientos, tanto de ida como de vuelta, desde Vila-real al Rototom de Benicàssim y viceversa. Guirao se desplaza en silla de ruedas

Se trata de un desplazamiento que no es exclusivamente por ocio, y al que tendría el mismo derecho que cualquier ciudadano, sino que los traslados están vinculados a que la asociación que lidera, junto a Casda, desarrollan una campaña solidaria para recaudar fondos con los que financiar la investigación de la distrofia muscular de cinturas 1F-D2 ----- y el Sida -enfermedad a la que quienes padecen este tipo de discapacidad son inmunes- y que se lleva a cabo en el marco del festival benicense.

Sin poder ir a una reunión

"Hoy tenía una reunión con los organizadores del certamen a las 11.00 horas y no he podido asistir porque no he encontrado un taxi adaptado que pudiera llevarme y devolverme", explica Guirao a Mediterráneo. Y es que, como afirma, "en la provincia de Castellón son contados los taxis adaptados con los que se cuenta en la actualidad. En otras ciudades se turnan para ofrecer un servicio 24h como a cualquier persona. Aquí la mayoría trabaja sólo de día, es difícil conseguir disponibilidad. Otros directamente te dicen que de noche trabajan pero si les sale un servicio de un grupo numeroso a Madrid o Barcelona, aunque no sea de personas con discapacidad, lo aceptan porque les sale más rentable. Y otros que pese a tenerlo adaptado se dedican más al servicio de asistencia en carretera para las compañías de seguros, que les proporciona más rendimiento económico".

Abrahán, en la puerta de su casa en Vila-real, esperando una solución a la falta de servicio adaptado para que pueda desplazarse a cubrir la campaña solidaria en el Rototom. ERIK PRADAS

Pero el caso no acaba ahí. El único taxi de la zona, con sede en Sant Joan de Moró, que incluso se presta para resolverle la papeleta a Guirao no puede trabajar en el área de Castelló (que abarca también Benicàssim) por la zonificación de este servicio. De hecho, el taxista en cuestión se enfrentaría a una posible multa por operar fuera de su demarcación, aunque ello supusiera facilitar el desplazamiento a una persona con discapacidad en un área en la que no le ofrecen el servicio mínimo.

Falta de autorización administrativa

Y a ello se añade que “la Delegación de Transportes en Castellón solo autoriza la recogida de asistentes a taxistas de alrededor de Benicàssim. Hablando con ellos y entendiendo estas medidas para los taxis normales, no entienden que esto es un servicio especial que no me presta nadie. Tengo disponible un taxi adaptado de Sant Joan de Moró, al que amenazan con multar si va a recogerme”, añade.

Guirao concluye, con impotencia: “te obligan a quedarte castigado, aislado o a bajo tu riesgo si consigues transporte para la ida, no saber si vas a poder volver a casa. Lo del Rototom es la gota que ha colmado el vaso, pero es una situación de hace muchos años, además de muchas veces precios abusivos y vejaciones. Aunque estoy agradecido a taxistas con empatía que quieren y no les dejan trabajar que nos apoyan y animan a denunciar”.

Aún con todo y aún con esperanzas de poder ir al festival, tanto Abrahán Guirao como desde la asociación quieren animar a ir al Rototom, disfrutar del festival y colaborar con la campaña El VIH también salva vidas, bien donando en los puntos establecidos o a los voluntarios su vaso antes de marcharse o bien haciendo un donativo directo: https://www.migranodearena.org/reto/el-vih-tambi-n-salva-vidas