El Ayuntamiento de Vila-real ha dado por cerrada, al menos en una primera fase, una de las reivindicaciones de los vecinos del barrio del Hospital, como es la urbanización de parte de los terrenos que en su día ocuparon las instalaciones de la empresa Herarbo, de manera que tras dos décadas de trámites han podido abrirse al tráfico las calles Alfred Nobel e Isabel de Villena que, hasta ahora, eran viales sin salida. Al respecto, tanto el concejal de Territorio, Emilio Obiol, como el alcalde, José Benlloch, agradecieron "la colaboración" de la familia Arenós (propietaria de los terrenos) como el trabajo de la empresa Pavasal, que asumió una actuación de 150.000 euros, en una época en la que los costes de materiales empezaron a incrementarse hasta en un 40%.

Benlloch ha subrayado que el proyecto “puede que sea poco ambicioso desde el punto de vista económico, pero hay detrás todo un trabajo y un cambio de paradigma en la gestión urbanística que pone solución a 20 años de reivindicaciones por parte de los vecinos y vecinas del barrio, por las dificultades de movilidad y otros problemas que ocasionaba el emplazamiento de una empresa que había ido creciendo en una zona residencial”.

Mejorar la comunicación

El alcalde ha avanzado que los trabajos desarrollados forman parte de “una primera fase de un proyecto más ambicioso, para mejorar la comunicación hacia la zona sur de la ciudad “que vivirá un desarrollo importante con proyectos como la comisaría de Policía Nacional, la futura EOI para la cual hemos ofrecido ya terreno a la Generalitat y otros negocios privados que van a redefinir el entorno de esta zona de servicios”.  Benlloch ha afirmado que “es una zona de gran crecimiento que requiere de actuaciones inteligentes” y en este sentido ha anunciado que “estamos trabajando ya para contactar con los propietarios de los terrenos contiguos para poder abrir también las calles hacia el parque del Llorón” y mejorar aún más la movilidad en el barrio.

El propio alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha quitado la cinta que ha dado por inaugurada la apertura de las calles Alfred Nobel e Isabel de Villena. JOSEP CARDA

Con la apertura de las calles Alfred Nobel e Isabel de Villena “ganamos en calidad de vida al eliminar molestias” gracias al acuerdo con la empresa Herarbo, propiedad de la familia Arenós, a la que el alcalde ha querido agradecer de manera especial la voluntad de acuerdo y colaboración. De hecho, otro de los beneficios que reportará a la ciudad la urbanización de estos viales es que los propietarios han cedido los cinco solares resultantes de manera gratuita al Ayuntamiento mientras no haya ninguna promoción inmobiliaria para su uso como aparcamiento.

Más de 100 plazas de párking

Así, tal y como ha detallado el concejal Obiol, se han habilitado un total de 103 plazas de parking para turismos, 10 de movilidad reducida y 12 para motos, además de entre 20 y 30 plazas de aparcamiento en cordón en las calles resultantes. El alcalde ha incidido en que estas 150 plazas de aparcamiento que se crean en lo que antes ocupó el recinto de Herarbo serán muy útiles en un distrito que concentra un gran número de servicios como el centro de salud de Carinyena, los mercados ambulantes, la feria, los centros escolares, el centro de día de Alzheimer, el CRIS de  la Fundación Manantial, entre otros.

Finalmente, Benlloch ha resaltado las oportunidades de crecimiento que brinda este proyecto, en un momento en que “estamos en la cifra récord de 52.200 habitantes, pero tenemos un drama porque no hay vivienda en alquiler ni mercado de compraventa”. En los cinco solares que se han generado con esta urbanización se podrán construir hasta 80 viviendas y entre 15 y 20 entresuelos, lo que, en palabras del alcalde, supondría 250 habitantes nuevos en este barrio.