El Ayuntamiento de Vila-real construye 48 nuevos nichos en el cementerio, como parte del plan de ampliación de la capacidad de enterramiento del camposanto anunciada por el alcalde, José Benlloch, este verano. Con este plan especial, el equipo de gobierno municipal prevé invertir 417.248 euros en los próximos meses que, con la incorporación de cerca de 600 nuevas sepulturas, garantizará el espacio para inhumaciones durante los futuros cinco años, como ya adelantó Mediterráneo.

Vila-real da, de esta forma, respuesta a la necesidad urgente de contar con más espacio en el recinto fúnebre, con una planificación en varias fases. Las obras iniciadas hace unas semanas, por un importe de 48.236 euros, contemplan la prolongación de una manzana de nichos con la construcción de 48 nuevos huecos, a cargo de la empresa local Urvisa. 

Sobrecostes

Mientras, el gobierno municipal avanza también la redacción del proyecto más ambicioso para la ampliación de la capacidad de enterramiento. Para poder dotar esta actuación, en fase de elaboración, fue necesario recurrir a bajas presupuestarias de obras que, a consecuencia del encarecimiento de costes de hasta un 40% por encima de los precios de licitación, no pudieron salir adelante, como la rehabilitación de la alquería del Botànic Calduch o construcción de un intercambiador de transportes. 

El plan de ampliación de la capacidad del cementerio es parte de los trabajos de mejora continua que el gobierno municipal está desarrollando en el camposanto. Así, en 2017 ya emprendieron un programa de remodelación integral, con el que se obtuvieron 620 unidades de entierro en total, entre la creación de más de 400 nuevos huecos y la remodelación de los espacios ya existentes. 

Desde entonces, el Ayuntamiento ha continuado con la remodelación del muro perimetral, la reparación de cubiertas y la mejora de aceras y zonas peatonales.

En su estrategia de mejora continua y teniendo en cuenta la situación climática, que ha elevado notablemente las temperaturas en esta época del año, el gobierno local impulsará también este año, con motivo de la festividad de Todos los Santos, un plan piloto de sombras en espacios públicos, a través de la colocación de un toldo en la explanada central del recinto, donde tendrá lugar mañana la tradicional misa de difuntos. 

Además, como todos los años, la conmemoración del día de Todos los Santos contará con un dispositivo especial, en el que destaca el servicio de autobús para garantizar el transporte público y gratuito a todos los vila-realenses que quieran acercarse al cementerio ese día o la víspera.