Los comercios de la ciudad confían en salvar la temporada y también sus negocios con la recuperación, tras la pandemia del covid-19, de eventos y celebraciones. Y a ello contribuye la Feria de Bodas y Comuniones que desde ayer y a lo largo de toda la jornada de hoy domingo se celebra en el edificio del Gran Casino, de la mano del Ayuntamiento y la Unió de Comerç de Vila-real (Ucovi) y en la que participan 14 establecimientos.
De esta forma, el Gran Casino, ubicado en el mismo centro de la ciudad vuelve a ser escenario de una iniciativa diseñada por un colectivo, como es Ucovi, para desarrollar una iniciativa que, en este caso, pretende visibilizar y poner en valor la amplia oferta existente en Vila-real en sectores como la ropa de celebraciones y complementos, floristerías o fotografía. El horario de visita de hoy domingo es de 11.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 20.00 horas.
Los participantes
De esta forma, en la cita Save de date, que recrea en el Gran Casino una gran celebración, participan los negocios Menta d’Aigua Flors, Marinna’s Selección, Beatriz Heredia, Tot Labors, Menuts, Niuet Comunión, MCGLO Complements, Escapa’t Viatges, Nautalia Viajes, Juanjo Goterris Fotógrafo, José Luis Pérez Fotografía, Joyería Hora y Punto, Organdí y Texas Hombre. El concejal del área, Diego Vila, reiteró el agradecimiento del consistorio a Ucovi por su labor en defensa del comercio de la ciudad, «especialmente en estos momentos de incertidumbre económica» y resaltó la «importancia de esta feria para dar impulso a un sector, el de los eventos y celebraciones, que se ha visto especialmente afectado por la pandemia».
A través de diferentes iniciativas, acompañadas siempre por el consistorio --la última de ellas la reedición de la tarjeta Fem Poble, que bonifica el 30% de las compras que se realicen los clientes en los comercios adheridos a la campaña-- se pretende mitigar la fuerte crisis que afecta al comercio, especialmente motivada por una pospandemia que no ha supuesto un incremento generalizado de las vendas y por el constante aumento de precios de los productos. Una circunstancia que, como informó Mediterráneo el pasado 20 de octubre obliga a muchos establecimientos a echar el cierre.