Vila-real reclama al Gobierno no prohibir el tráfico en el centro de la ciudad

El pleno del Ayuntamiento de Vila-real ha aprobado la propuesta de alcaldía para instar a que el Gobierno central modifique los criterios de aplicación de las zonas de bajas emisiones (ZBE) en las ciudades de más de 50.000 habitantes. El concejal de Territorio y Movilidad, Emilio Obiol, ha justificado esta petición por el “grave perjuicio que los criterios actuales de aplicación comportan para las ciudades pequeñas, como es el caso de Vila-real, donde puede ocasionar un daño tremendo al comercio local”.

La propuesta pide al Gobierno que se establezca como criterio para las ciudades intermedias el mismo que en los municipios de más de 20.000 habitantes, que únicamente están obligados a regular una zona de bajas emisiones en caso de que superen los valores límite de contaminantes.

“Si Vila-real con su estructura demográfica y estructura urbana no tiene niveles de contaminación elevados, no necesita esta zona de bajas emisiones”, ha alegado Obiol, quien ha recordado que la creación de la ZBE es solo uno de los postulados de la Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética.

Vila-real pedirá al Gobierno cambiar las exigencias de las Zonas de Bajas Emisiones

“Este Ayuntamiento lleva ya tiempo aplicando el resto de medidas que contempla esta legislación como es el impulso al transporte urbano gratuito, con el bus Groguet, la aprobación de un Plan de Movilidad Urbana Sostenible, el plan de aparcamientos disuasorios con más de 800 plazas, la flota municipal de vehículos eléctricos, la creación de 11 kilómetros de carril bici o la peatonalización de la zona centro de la ciudad”, recuerda el concejal. La propuesta para instar al Gobierno a este cambio de criterio ha contado con los votos a favor de PSPV, PP y Ciudadanos, la abstención de Vox y el voto en contra de Unides Podem y Compromís.

Subvenciones y resoluciones urbanísticas

Por otro lado, en materia económica, la corporación ha dado el visto bueno a un expediente de créditos extraordinarios por importe de 460.000 euros que permitirá hacer frente a cuatro convenios con entidades de la ciudad que llevan a cabo actividades en estos primeros meses del año. Se trata de un total de 170.000 euros para hacer posible la celebración de la Semana Santa, las actividades de la Asociación Cultural Flamenca Andaluza de Vila-real, el Festival Internacional de Cine de Vila-real, VIST, o la Ruta de la Tapa que organiza la Asociación de Hostelería y Ocio de Vila-real (Ashiovi).

Además, este expediente de créditos también incluye el pago de dos resoluciones urbanísticas heredadas de la etapa del PP por importe de 290.000 euros en total. El concejal de Hacienda, Xus Madrigal, ha explicado que con este expediente “evitamos que la vida de Vila-real se paralice y seguimos haciendo frente a las consecuencias económicas de la herencia del urbanismo del PP”. Este punto ha contado con los votos a favor de PSPV y Unides Podem y la abstención del resto de grupos.

Declaraciones institucionales

Como declaraciones institucionales se han aprobado dos propuestas: una de apoyo a los afectados por el terremoto de Turquía y Siria y otra para apoyar y dar visibilidad a las personas que padecen fibromialgia. En el caso de la propuesta con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, la declaración ha contado con el apoyo de todos los grupos municipales a excepción de Vox.

Por otro lado, la sesión también ha aprobado los planes de prevención y de atención de drogodependencias y otras adicciones elaborados por la Unidad de Prevención Comunitaria de Conductas Adictivas (UPCCA) y del centro de día Lluís Alcanyís. Ambos documentos se han aprobado con voto favorable de todos los grupos a excepción de Vox, que se ha abstenido.

Protesta de policías locales

Además, el pleno celebrado hoy por el consistorio se inició con una concentración de varios policías locales que, como apuntaron, protestan por la "precariedad" en la que trabajan y la falta de efectivos de que dispone en la actualidad el cuerpo de seguridad municipal. La protesta, que obligó en varios momentos al alcalde, José Benlloch, a pedir a los concentrados "respeto" a la sesión plenaria y a la corporación, en diferentes intentos de algunos agentes de intervenir en el pleno. Los concentrados han exhibido carteles en los que, por ejemplo, se advertía "menos personal, más inseguridad", en referencia a las 42 plazas de la Policía Local que quedan por cubrir de una plantilla de 112 personas.

El alcalde Benlloch ha reconocido el problema y asegura que se está trabajando desde hace meses en poder cubrir las plazas inexistentes y que, incluso, "tengo un informe del jefe de la Policía Local en el que se asegura que no se puede prestar el servicio de forma adecuada" por las deficiencias en cuanto al personal disponible en estos momentos. Pasado unos 40 minutos del inicio del pleno y tras un tenso debate entre varios agentes, el alcalde Benlloch y la edila de Seguridad Ciudadana, Silvia Gómez, los concentrados abandonaron el salón de sesiones.

Al respecto, el Sindicato Profesional de Policía Locales y Bomberos (SPPLB) ha pedido una reunión con el alcalde para abordar esta problemática.