Vila-real amplía a la avenida França un sistema inteligente en pasos de cebra para mayor seguridad de los peatones

El departamento de Movilidad del Ayuntamiento de Vila-real, adscrito a la concejalía de Territorio, en colaboración con el área de Servicios Públicos, ha decidido ampliar a la avenida França el nuevo sistema de ayuda inteligente para los peatones que ya se puso en marcha en marzo del pasado año 2024 en uno de los pasos de cebra de la avenida La Murà, en concreto en el ubicado a la altura de la plaza de Mossén Ballester.

«Aquella primera fase de esta prueba piloto ha sido un éxito», señala a Mediterráneo el edil de Territorio, Emilio Obiol, quien incide en que el dispositivo «ha cumplido muy bien su función de alertar ante la presencia de peatones en uno de los pasos con mayor intensidad de tránsito de viandantes, en un punto neurálgico del centro de la ciudad, como es la avenida La Murà, en el que existen gran cantidad de servicios».

Segunda fase

El sistema se ha colocado, en una segunda fase de la iniciativa piloto, en el paso existente a la altura del Passeig de l’Estació, frente a la terminal de trenes. Se trata de un sistema de balizas luminosas de detección y protección para las personas que circulan a pie, que se ha colocado, como explica Obiol, con «la voluntad de avanzar en una movilidad más segura en nuestra ciudad, aprovechando las innovaciones tecnológicas en mobiliario urbano y actuando en aquellos puntos en los que puede existir una mayor peligrosidad debido a la densidad de tráfico o una mayor afluencia de peatones».

Las balizas en cuestión, situadas una a cada lado de la calle, detectan la presencia de viandantes que van a cruzar el vial y activan un sistema de señales luminosas para advertir a los conductores sobre la prioridad de paso del peatón, tanto de día como de noche. El sistema ilumina a la persona y el paso de peatones y, al mismo tiempo, activa la baliza intermitente en ambos lados de la calzada.

Más dispositivos

En cualquier caso, el concejal de Territorio avanza que se aplicará un tercer aparado de estas características en otro punto de la ciudad todavía por decidir, aunque se postulan básicamente dos emplazamientos, como son las calles Ermita o Penyagolosa. Una ubicación esta última que gana peso, a tenor de la existencia de una importante intensidad de tránsito de vehículos y peatones en un espacio en el que hay varios colegios y comercios.

Balizas luminosas para ayudar a cruzar a los peatones en Vila-real

Obiol señala que la decisión de instalar este segundo dispositivo en el entorno de la estación de trenes se ha tomado porque «es un punto central con una alta frecuencia de personas que van a pie, por lo que era fundamental reforzar la seguridad, no solo del paso, sino de toda la vía. Por este motivo, también se han adecuando las esquinas de las aceras y se ha corregido ligeramente la orientación del propio paso de peatones.

Además, recuerda que se prohíbe realizar un giro a la izquierda acceder al parking de la estación desde el carril en dirección a València, de manera que el cambio de sentido debe hacerse en la rotonda que hay a 150 metros.