Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Vila-real impulsa la copia de seguridad de su banco de semillas para preservar 350 variedades autóctonas

El frigorífico que acoge estas semillas —la cantidad de las cuales irá ampliándose— está ubicado en el Archivo Municipal y forma parte del fondo patrimonial de la ciudad

Vila-real crea una “copia de seguridad” de su banco de semillas.

Vila-real crea una “copia de seguridad” de su banco de semillas. / MEDITERRÁNEO

Vila-real ha dado un paso más en la protección de su patrimonio agrícola con la puesta en marcha de la “copia de seguridad” de su banco de semillas, creado en los huertos urbanos de la ciudad. La iniciativa, presentada hoy por la concejala de Medio Ambiente y vicealcaldesa, Maria Fajardo, se realiza en colaboración con la ONGD Pankara EcoGlobal, que desde hace años trabaja en la conservación de la biodiversidad cultivada valenciana.

Durante el encuentro, Óscar Climent y Juan David Felip, responsables de Pankara, explicaron que actualmente el banco de semillas cuenta con más de 350 variedades registradas, entre las que se incluyen tomates, habas, melones, berenjenas, judías y guisantes. Algunas son autóctonas de Vila-real, mientras que otras proceden de diferentes localidades de la provincia y de otras zonas de la Comunitat Valenciana. La duplicación de estas semillas en un espacio distinto responde a la necesidad de descentralizar el patrimonio agrícola y garantizar su preservación frente a posibles contingencias.

“Hace años que trabajamos en recopilar semillas y conservar así el patrimonio de la biodiversidad cultivada valenciana. Hay que conservarlas, cultivarlas y contribuir para que no desaparezcan”, subrayaron desde Pankara. La copia de seguridad se alberga en un frigorífico ubicado en el Archivo Municipal, un espacio que forma parte del fondo patrimonial de la ciudad y que ya custodia documentos históricos y fotografías. Este almacenamiento permite no solo preservar las variedades más selectas, sino también facilitar la consulta y recuperación de semillas por parte de agricultores, investigadores y vecinos interesados.

El frigorífico que acoge estas semillas —la cantidad de las cuales irá ampliándose— está ubicado en el Archivo Municipal.

El frigorífico que acoge estas semillas —la cantidad de las cuales irá ampliándose— está ubicado en el Archivo Municipal. / MANOLO NEBOT_ROCHERA

El edil del área, Santi Cortells, destacó la importancia de esta medida como parte de un compromiso más amplio de la ciudad con la sostenibilidad y la educación ambiental. “Cada semilla que conservamos es una historia viva de nuestro territorio: refleja el saber de nuestros agricultores, la riqueza natural que nos rodea y los sabores tradicionales que nos conectan con nuestra historia”, explicó Fajardo.

La iniciativa también tiene un componente social y educativo. Las personas interesadas en obtener semillas para el cultivo pueden acudir a los huertos urbanos durante la mañana o dirigirse a la Concejalía de Medio Ambiente, donde se les facilitará de manera gratuita. Así, Vila-real no solo asegura la conservación de su biodiversidad agrícola, sino que promueve la participación ciudadana y la transmisión de conocimientos sobre variedades tradicionales.

El proyecto, iniciado en 2016, ha ido creciendo progresivamente y hoy se consolida como un referente en la protección de la biodiversidad local. La copia de seguridad del banco de semillas garantiza que estas variedades, muchas de ellas históricas, puedan seguir cultivándose en el futuro y formar parte activa de la cultura agrícola valenciana.

Con esta acción, Vila-real reafirma su papel como ciudad comprometida con la sostenibilidad, la cooperación y la conservación del patrimonio natural y cultural. La preservación de semillas se convierte así en un símbolo tangible de la identidad de la región y un paso decisivo para garantizar que las próximas generaciones puedan seguir disfrutando de la riqueza agrícola que caracteriza al territorio.

Tracking Pixel Contents