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VILLARREAL CF

La crónica | El Villarreal sigue sin rematar los partidos y vuelve a empatar (1-1)

Dos errores de ambos porteros marcaron un choque en el que el Submarino pudo apuntillar al Celta tras el 0-1 con claras ocasiones de Dia y Trigueros

Boulaye Dia ha sido el único delantero disponible para Unai Emery en el Villarreal en el partido ante el Celta. VILLARREAL CF

Dos regalos de los porteros marcaron el duelo de Balaídos. Rulli y Dituro fueron de los mejor de sus equipos, pero dejaron sendos errores garrafales que propiciaron los únicos dos goles del partido que acabó con otra ‘X’ más para el Villarreal CF ante un Celta irregular (1-1). El Submarino se presentaba con un solo delantero disponible pero su gran problema fue, otra vez más, no saber finiquitar un partido que tenía encarrillado con el 0-1 cuando dispuso de hasta tres oportunidades claras para apuntillar a su rival. Otro empate más que no es malo, pero tampoco lo suficientemente bueno para las aspiraciones de una plantilla diseñada para estar arriba y que ahora deambula por la zona media de la clasificación. 

Así te hemos contado minuto a minuto el Celta-Villarreal desde Balaídos.

Uno de los puntos diferenciales de este Villarreal es su poderío en ataque. En Vigo, Unai Emery tuvo que recomponer el equipo ante la acumulación de lesiones con la que afrontaba un nuevo partido en horario de paella. Danjuma y Capoue, quienes no pudieron estar a última hora en la lista de convocados, alimentaron la relación de bajas por problemas físicos en la que ya figuraban Gerard Moreno, Paco Alcácer y Sergio Asenjo, sin contar que Yeremy Pino también está entre algodones.

El técnico lo resolvió recomponiendo el centro del campo y el dibujo táctico. Situó a dos laterales teóricos como Rubén Peña y Alberto Moreno como interiores, otorgó a Iborra el rol de Capoue al lado de Parejo y ubicó a Trigueros como segundo punta o enganche con Boulaye Dia, único delantero nato que le quedaba en nómina. Y el Villarreal, haciendo honor a la gran plantilla que tiene, funcionó perfectamente. No de forma tan brillante como en sus mejores momentos, pero sí con un gen competitivo y una sobriedad táctica que le están haciendo crecer y mejorar sus prestaciones como equipo. 

Un equipo más fiable

El Submarino ha recuperado su fiabilidad. Desde el orden y la solidaridad colectiva para defender se ha reencontrado consigo mismo. El Celta salió con mucha efervescencia, pero poco a poco fue perdiendo gas. Un tiro de Nolito, bien atajado por Rulli, y un centro envenenado de Javi Galán, constituían su producción en ataque.

El Villarreal tardó en conectar con el área del Celta, pero cuando lo hizo fue con peligro. No es fácil ser héroe y villano en un mismo partido, pero Matias Dituro lo fue en Balaídos. El portero argentino le regaló el 0-1 a los amarillos en una jugada de esas que sacan los colores a cualquiera, aunque también fue mérito la pillería de Parejo, quien se encontró con el obsequio y se lo reembolsó a Alberto Moreno para que solo tuviera que empujar el balón.

A partir de ese momento se abrió la espita. Y Dituro se convirtió en un muro inexpugnable que evitó un contundente marcador para el Celta. Trigueros y Dia dispusieron de sendas oportunidades con llegadas claras ante el guardameta céltica. 

Este es el mapa de calor de los futbolistas de Celta y Villarreal

El Submarino llegó al descanso con el control del partido y el resultado a favor, pero sin haber apuntillado a su rival.

La superioridad de los de Emery en el segundo tiempo continuaba siendo evidente. El Villarreal no dejaba respiro a un Celta totalmente desactivado por el orden prusiano y el trabajo colectivo de un bloque que funcionaba como un reloj. Todo parecía bajo control hasta que Rulli le devolvió el favor al conjunto gallego al repeler un balón que podría haber atajado y recogiendo el rechace Brais Méndez para empatar el partido. Y todo cambio de repente. Comenzaba un partido diferente.

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El Celta se reactivó y los futbolistas de talento como Brais y Iago Aspas empezaron a lucir, poniendo en apuros al equipo groguet, que pasó por sus peores momentos, incluso estando más cerca el 2-1 que el 1-2. Pero el equipo vigués funciona por impulsos y fogonazos, y luego vuelve a diluirse. El Villarreal mostró las uñas en el tramo final, con los tres cambios efectuados or Emery, pero no le llegó para ganar. Y sigue dejando tomar distancia a sus rivales por la lucha por Europa, aunque ofreció síntomas de mejoría ostensible. El martes, la Champions League

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