Es consciente de que estar en semifinales de la Champions League está al alcance de muy pocos. Fernando Roig está orgulloso tanto de su equipo como de su afición, la cual está respondiendo con creces en el camino hacia la final de París. La masa social del Villarreal CF respondió en Turín, en Múnich y lo hará en Liverpool, con 3.000 gargantas animando, como espera que también llenen La Cerámica en el partido de vuelta del 3 de mayo.
El dirigente amarillo se congratulaba ayer de la gesta grogueta hasta la fecha: «El hecho de disputar una semifinal de Champions por segunda vez es un premio al trabajo bien hecho». «Estar entre los cuatro mejores de Europa es muy complicado, pero lo afrontamos con ilusión y muchas ganas de poder hacerlo bien», indicó.
«Esperemos que esta vez nos vaya mejor quela anterior, a ver si conseguimos llegar a la final», expuso, reconociendo que, como club, «ahora mismo estamos mejor estructurados y estamos en mejores condiciones de afrontar una semifinales de Champions League que la vez anterior».
Sin complejos
Para el mandatario amarillo, hay que tener respeto y ambición. «El Liverpool es un gran equipo, pero estamos convencidos de que podemos conseguir un buen resultado en la ida y una gran eliminatoria. Queremos hacer un buen papel y pase lo que pase debemos estar orgullosos de haber llegado hasta aquí», dijo.
Incluso no oculta que aspira a lo máximo: «El Villarreal está en un gran momento, en uno de los mejores de su historia. Hemos realizado una Champions de sobresaliente y si ahora conseguimos la matrícula de honor, mejor».
La afición, la Policía...
No quiso dejar pasar la ocasión de felicitar a los suyos. «Estamos satisfechos por la afición, por haber llenado las 3.000 localidades para viajar a Liverpool. Nosotros como club hemos ayudado a nuestra masa social para que todo el que quiera pueda ir. Estoy seguro que si hubiéramos tenido 5.000 entradas las habríamos vendido», arguyó.
«La Policía, las comisarías y todos los funcionarios se han portado muy bien con el Villarreal, para hacer los pasaportes a la afición, y es de agradecer», recalcó.
Las medidas especiales para el partido de vuelta
Roig, a su vez, explicó los pormenores de cara al duelo en Vila-real. «En la vuelta vamos a tomar medidas especiales. Será un partido de alto riesgo y las entradas serán nominativas. Y a excepción de la zona de visitante, que será toda para el Liverpool, no se venderán entradas a ciudadanos ingleses a otras zonas del campo. No nos va a pasar lo que le pasó al Barcelona en la Europa League», enfatizó.
«Queremos que sea una gran fiesta de la afición del Villarreal y que el Estadio de la Cerámica se tiña de amarillo», exclamó el presidente, que recordó que «no se podrán revender entradas, habrá controles y el que no se identifique junto a su entrada no podrá acceder el estadio».
En cuanto a LaLiga, quiere el 6º puesto: «Depende de nosotros, ya que la Real Sociedad debe venir a casa. Sería ideal clasificarnos para Europa vía Liga», terminó.
