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VILLARREAL CF

La crónica | La 'new Gen' del Villarreal confirma su talento en Israel (1-2)

Jugadores como Cuenca, Baena, Yeremy o Morlanes dejan muy buenas sensaciones ante el Hapoel Beer Sheva

Álex Baena y Yeremy Pino reflejan la alegría del Villarreal tras ganar al Hapoel Beer Sheva. VILLARREAL CF

El Villarreal CF ha cumplido este jueves con su papel de gran favorito del grupo y candidato al título. No fue una victoria brillante, pero sin tan justa como corta porque tras el sprint final pudo firmar un marcador mucho más abultado que el 1-2 final. El Hapoel Beer Sheva fue un correoso rival, pero a poco que los amarillos apretaron, se le descosieron las costuras y tuvo suerte de acabar con una derrota digna. Los objetivos siguen cumpliéndose y parece encarrilado el primer puesto en la fase de grupos que lograría evitar un cruce en las eliminatorias. Y el domingo, un duro partido ante el Sevilla que se afrontará con la unidad A fresca y descansada.

Unai Emery sigue con su plan en la Conference League. Y no es otro que depositar su confianza en el fondo de armario de la plantilla. ¿Apuesta arriesgada? Cambiar el once casi al completo de una competición a otra siempre supone asumir desajustes, pero cuando armas un plantel con jugadores importantes en todas las líneas, debes alimentar la competencia y dosificar los esfuerzos para obtener el máximo rendimiento en todas las competiciones. El Villarreal saltó al campo del Hapoel Beer-Sheva con solo un jugador que repetía en el once del partido ante el Betis: Yeremy Pino.

Presión inicial de los locales

Los israelitas saltaron al campo hipermotivados ante uno de los favoritos de la competición como es el Submarino. Un rol que otorga pedigrí pero que exige. La presión alta del Hapoel generó dudas en la idea de juego que distingue a los amarillos. Imprecisiones en el pase y dudas en Jorgensen para canalizar la primera línea de creación. Eran los efectos colaterales de alinear un once con tantos futbolistas nuevos. Pero poco a poco la maquinaría fue encajando y los fallos se minimizaban.

Emery incrustó a Dela en el lateral derecho y colocó a Mojica en la izquierda, con la pareja Cuenca y Mandi en el centro. Y el equipo sufrió poco atrás a pesar de algunos errores en el pase generaron cierta incertidumbre en los primeros compases. No se pasaban apuros, aunque tampoco se llegaba con fluidez. Solo Baena, estelar otra vez en Europa, asumía el papel de catalizador del juego de ataque. La chispa, la velocidad, el trabajo y, sobre todo, el talento del joven futbolista ponían en serios apuros a un Hapoel, que pese a su ímpetu y motivación, estaba varios puntos por debajo de un Villarreal al que le bastaba con jugar a medio gas para ser muy superior.

Un oasis llamado gol

En medio de la penumbra, un visionario pase en profundidad, de Morlanes trazado con la exactitud del compas de mejor delineante, acompañado de un desmarque a la altura de la asistencia de Baena, desencadenó en un claro penalti que sin el suspense del VAR (no entra en funcionamiento en esta primera fase de grupos de la Conference) señalaría el árbitro escocés del partido. Morales adelantó a un Villarreal demasiado gris pese al 0-1.

El bisturí de Emery

No estaba a gusto consigo mismo el equipo de Emery al que le costaba hilvanar su juego. Y tan claro lo vio el técnico que metió bisturí. Dos cambios en el descanso con la entrada de Jackson y Kiko Femeni por Chukwueze y Dela. Y dos más a los pocos minutos, echando mano de su artillería pesada con Parejo y Capoue. Y en el ínterin, el Hapoel empató el partido, cuando el Villarreal intentaba armarse y recuperar el mando. Apenas cinco minutos le duró la euforia al equipo israelí porque la entrada de los dos mediocentros titulares le dio poso al Submarino. La ‘new Gen’ grogueta dejó su sello otra vez. Las diabluras de un jugador como la copa de un Pino de nombre Yeremy, con centro templado al área, acabarían con un remate de play de Baena que minaba el pundonor del Hapoel.

Pudo golear

Con Capoue y Parejo el Villarreal ya mandaba… pero desperdició ocasiones tan claras como inverosímiles. Jackson a un metro de la línea de meta, Danjuma solo ante el portero en un mano a mano y mandando a las nubes un penalti pésimamente ejecutado. El arreó final fue suficiente para sumar la segunda victoria y confirmar quién es el favorito del grupo. Objetivo cumplido.

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