La llegada de Quique Setién al banquillo del Submarino no está aportando el efecto esperado. Cuatro partidos oficiales, dos de LaLiga y dos en Conference League, y ninguna victoria, duelos saldados con un empate y tres derrotas. Y precisamente perder es lo que hizo ayer por primera vez en la temporada en casa.
Hasta la fecha, ni en la competición doméstica ni en Europa había caído como local en lo que llevamos de ejercicio futbolístico, convirtiendo el Ciutat de València en un fortín. Pero ayer llegó el primer KO amarillo como local en competición oficial.
Los números en el Ciutat
El de anoche fue el último compromiso groguet en el estadio del Levante UD como anfitrión. Han sido 9 partidos, 5 de LaLiga y 4 de Conference League, en el que los amarillos solo han perdido un partido, el de ayer ante el Real Mallorca (0-2). Única derrota liguera, unida a un empate, ante el Sevilla (1-1), y tres victorias frente al Elche (4-0), Osasuna (2-0) y Almería (2-1).
A su vez, en Conference, los amarillos han cosechado tres triunfos, ante Hajduk Split (4-2), Lech Poznan (4-3) y Austria Wien (5-0), además de la igualada ante el Hapoel Beer Sheva (2-2).
Unos números muy positivos, empañados ayer con la primera derrota en el presente ejercicio como local.
Baja sensible para Cornellà
El duelo ante los bermellones, además, conlleva una importante baja para el Villarreal con vistas al próximo partido liguero, el último antes del parón por el Mundial de Qatar. Los amarillos pierden a Pau Francisco Torres, ya que el central vio la quinta cartulina amarilla y tendrá que cumplir sanción por acumulación de amonestaciones.
Los cambios, tarde
Otra de las situaciones anómalas que dejó el encuentro fue el hecho de que pese a ir con el marcador abajo, Setién tardó mucho en introducir variantes ofensivas, especialmente a Morales, al que le sacó en el minuto 90.