VILLARREAL CF

La autocrítica de Pepe Reina tras la dura derrota del Villarreal en Elche

El guardameta amarillo reconoce que el varapalo "duele mucho" y que deben "mejorar en muchos aspectos"

Reina ejerce de portavoz de un vestuario que salió muy tocado después de la dura derrota ante el Elche.

Reina ejerce de portavoz de un vestuario que salió muy tocado después de la dura derrota ante el Elche. / Villarreal CF

Pepe Reina lleva más de 20 años en el fútbol profesional y no ha llegado al Villarreal para tener una jubilación feliz. Dónde ha jugado siempre ha demostrado una fuerte implicación con el grupo y el club le fichó para asumir el rol de mentor de los jóvenes porteros como Iker Alvarez y Jorgensen y para ser un buen recambio de Rulli. Ambos papeles los ha interpretado a la perfección, pero ha añadido el de ser una de las voces potentes del vestuario. En ese papel también se halla el de ejercer la autocrítica, porque con ella se pueden corregir errores y mejorar. 

La derrota en Elche no formaba parte del guion del Villarreal, pero más duro que perder los tres puntos fue la actitud que mostró el equipo en el Martínez Valero y la descomposición como bloque que quedó patente durante demasiado tiempo. Y eso que Setién ya había advertido con contundencia de que no quería ser el primer rival en perder contra el Elche. El colista le sacó los colores al Submarino.

El veterano portero groguet no dudó en reconocer el pésimo partido de su equipo en Elche. «Sin duda tuvimos un muy mal día. No estuvimos bien. Ellos aprovecharon nuestras deficiencias técnicas, perdimos muchos más balones de lo que es normal, y sacaron partido de ello generando muchas contras y muy peligrosas», sentenciaba Reina, quien fue uno de los pocos que se salvó de la zozobra del Martínez Valero.

Un duro varapalo

Los rostros de jugadores y consejeros del Villarreal a la salida del Martínez Valero eran todo un poema. La debacle ante el Elche fue algo más que una mera derrota. «Hay que hacer autocrítica, porque está es un traspiés que duele. El 3-1 de Elche pesa mucho, pero esto sigue y hay que continuar peleando», reconocía el guardameta. El equipo volverá al trabajo mañana martes, en una semana en la que el vestuario tiene que cerrar las puertas y hacer una confesión de grupo. «Debemos analizar durante estos días lo que hay que mejorar, ya que sin duda hay muchas cosas que rectificar», afirmaba Pepe Reina.

No solo fue un problema de actitud el que evidenció el equipo amarillo en Elche, las constantes pérdidas de balones y el desorden táctico fueron otras de las causas del desastre. «A ellos les salió bien su plan, y a nosotros no. Al final cuando tienes poca eficiencia técnica y fallas muchos pases, suceden estas cosas. Necesitamos mejorar en muchos aspectos. Cometimos errores en momentos claves y eso se paga», analiza el guardameta groguet.

La derrota pudo ser peor

El Villarreal concedió goles en instantes claves del partido y cometió dos penaltis de libro, pero también evitables ambos. Lo peor en Elche fue que el colista pudo ganar por una renta más amplia que el 3-1: «Al final se trata de no conceder ocasiones claras a tu rival. Siempre hay que tener mucha paciencia , no desesperarse y no dar ventajas, algo de lo que pecamos demasiado».

El Villarreal cayó en la precipitación, perdió el sitio en el campo y la anarquía táctica fue dando ventaja poco a poco al rival: «A veces debes saber esperar tu momento. Cuando eres un equipo de mucha posesión, los partidos se hacen complicados y muy cuesta arriba. Por eso debes estar siempre muy concentrado y no dar ventajas, ya que si ellos marcan se te complica muchísimo».

Reina continuaba ejerciendo de voz de la conciencia del vestuario. «Quizás la segunda parte ha sido un golpe duro y haya tenido también algo de psicológico. Venías al campo del colista, ante un equipo que no había ganado un partido, y si te pones por detrás, esa presión es más alta», asegura.

La advertencia de Setién

Y a pesar de la insistencia de Setién durante la semana del temor de convertirse en el estreno del casillero de victorias de un equipo que aún no había conjugado el verbo ganar en toda la primera vuelta, los ilicitanos se estrenaron con el Villarreal. «Nadie espera que pueda pasar eso, puedes pensar que es un partido que vas a ganar, y si te ves por detrás en el marcador, es un golpe mental que afecta. Debemos tener la calma y la serenidad para seguir jugando y buscar una reacción cuando pasan estas cosas. No hemos sabido hacerlo, no seguimos el plan de partido. Perdimos la cabeza y el sitio, por lo que fue un muy mal partido en general», concluía.