Marcelino pierde a Barry pero es ambicioso: "Ganar al Girona sería dar un paso hacia el premio gordo"

El entrenador del Villarreal quiere la plaza de Champions y recortarle más puntos al Athletic y apunta a la cuarta posición: «Siempre hay que mirar a quien tienes por delante»

El técnico del Submarino manda un mensaje de ánimo a su homólogo del Girona, Míchel Sánchez, hospitalizado y que no podrá dirigir a su equipo en Montilivi

El entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral.

El entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral. / Villarreal CF

Ismael Mateu

Ismael Mateu

Girona (Enviado Especial)

Es ambicioso y quiere jugar la Champions League. El entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral, remarcó ayer que «una victoria en Girona sería dar un paso hacia el premio gordo», en alusión a la clasificación de su equipo para la Liga de Campeones, reconociendo que quiere recortarle más puntos al Athletic y apunta a la 4ª plaza: «Siempre hay que mirar a quien tienes por delante». Un técnico que pierde a Thierno Barry, lesionado de isquiotibiales a última hora, y a Kiko Femenía, pero que recupera a Tajon Buchanan, que arrastraba problemas físicos.

«Estamos en el tramo final y cada victoria para nosotros significa dar un gran paso adelante», indicó en una rueda de prensa el asturiano, que matizó que ganar en Girona «no sería definitivo», aunque sí permitiría al Villarreal «depender de nosotros mismos».

Marcelino García Toral sigue coleccionando registros como entrenador del Villarreal.

Marcelino García Toral sigue coleccionando registros como entrenador del Villarreal. / Villarreal CF

El preparador del Submarino pronosticó «un partido complicado ante un rival revitalizado en el aspecto mental», tras romper la pasada jornada una mala racha de resultados ganando al Mallorca.

Aspectos a evitar

Marcelino analizó que situaciones deben corregir para ganar en Girona. «Tenemos que evitar quedarnos con diez y conceder penaltis. Tenemos partidos de máxima dificultad, pero también partimos de la máxima credibilidad de que lo podemos ganar», argumentó .

El asturiano reconoció que prefiere jugar en el tramo final del campeonato ante equipos «que no tengan un objetivo», si bien alertó de que «al Girona puede, aunque creo que no, que aún le haga falta algún puntito», recalcó.

«Pero lo principal es que nosotros logremos nuestro máximo nivel. Tuvimos que ir a ganar a Vallecas, a Getafe y al campo del Betis y lo hicimos», recordó el míster, que valoró que el Villarreal ha sido «capaz de recortar cinco puntos al Athletic en las últimas jornadas».

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Marcelino, entrenador del Villarreal. / VILLARREAL CF

Los equipos españoles en Europa

Marcelino quiso felicitar a todos los equipos que han competido esta temporada en Europa, en especial a los que llegaron a semifinales, «porque gracias a ellos vamos a tener cinco equipos en la Liga de Campeones». «Al Betis le deseo lo mejor para la final y lo del Athletic es una pena por la ilusión que tenían por jugar esa final en San Mamés», indicó el entrenador, que también elogió el nivel exhibido por el Barcelona en su semifinal.

«Nuestro objetivo es ganar, porque si no lo hacemos nosotros, no hay objetivo», precisó el asturiano, que sobre las ausencias por lesión de Kiko Femenía y de Thierno Barry dijo que «no están, pero tenemos opciones para buscar soluciones con los que sí están».

Míchel, descontento en Butarque

Míchel, entrenador del Girona. / X

Ánimos para Míchel

El preparador amarillo, a su vez, mostró su apoyo al técnico del Girona, Míchel Sánchez, próximo rival de su equipo, al que deseó una “rápida recuperación” tras ser hospitalizado de urgencia por un problema de salud y dijo que los técnicos se lo han de tomar con más calma pero asumió que no es fácil.

“No va a poder estar con nosotros en el campo y le deseamos una rápida recuperación con todo nuestro apoyo y cariño”, dijo el asturiano.

“Míchel, te mandamos todo el apoyo y seguro que muy pronto te vemos otra vez en el banquillo”, añadió Marcelino, que reflexionó sobre la tensión a la que se ven sometidos los entrenadores, que en ocasiones provoca problemas de salud.

“No es sencillo, la derrota para los entrenadores dura mucho tiempo. No es acabar el partido y ya está. Siempre se habla de la soledad del entrenador”, comentó el asturiano, que recordó que Míchel “viene de una temporada exitosa”.

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