La crónica del Villarreal-Leganés: Otro trago hacia la Champions (3-0)

«¡Quiere la Champions, la aldea quiere la Champions...!» Ese fue el cántico de guerra de la afición del Submarino mediada la segunda parte. Con la comodidad del 3-0 que imperaba en el marcador, la masa social amarilla saboreaba la primera victoria y goleada cómoda de la temporada.

Por fin. Sin goles anulados, sin penaltitos a favor del rival y sin los caprichos del VAR. El Villarreal se toma otro trago hacia la Liga de Campeones, un triple trago en forma de 3-0 para imponerse a un atrevido Leganés, equipo que no salió a especular y al que le penalizó la enorme diferencia de calidad de una y otra plantilla.

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Porque si algo tiene este Submarino es talento, como el que derrocharon sobre el césped del Estadio de la Cerámica Nicolas Pepe, que dio un recital y anotó un gol, y el killer Ayoze Pérez, autor de los otros dos tantos que sirvieron para ajusticiar a un rival herido de muerte y, de paso, meter presión a Athletic Club y Betis en su pelea por la 4ª plaza.

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Una victoria sin paliativos, con siesta incluida en gran parte de la segunda mitad, que vale para volver a igualar a puntos a los bilbaínos, ambos 4º con 64 unidades, distanciándose de los béticos en seis, aunque ambos deben jugar en la noche de este jueves para cerrar la jornada.

Un partido que no comenzó bien. El Leganés salió muy atrevido al césped de La Cerámica, con una presión muy alta y su línea defensiva en el centro del campo... demasiado riesgo ante un Villarreal repleto de ‘balas’ ofensivas.

Con ustedes: don Ayoze

Marcelino dio descanso a Sergi Cardona y Sani Comesaña con relación a Girona, dando entrada a Alfonso Pedraza y Dani Parejo. Los madrileños buscaron mucho profundizar por bandas, exigiendo tanto a Pau Navarro como a Pedraza, pero Costa y especialmente el ‘Jefesito’ Foyth estuvieron excelentes en las ayudas y coberturas.

Los centrales fueron quienes recuperaron balones clave para que los artistas del centro del campo y del ataque amarillo dejaran sentenciado el choque.

Tras varias contras de Yeremy, Parejo y Baena, aparecieron Nicolas Pepe, peligro constante todo el encuentro y don Ayoze, mister gol. A la media hora el partido estaba sentenciado con dos tantos del tinerfeño, el primero tras jugada de Gueye, remate de Pedraza y toque de espuela de Ayoze, en el 23’; y el segundo tras batir por bajo a Dmitrovic con asistencia de Yeremy, en el 31’, demostrando que la conexión canaria funciona.

Con la tranquilidad del 2-0, el Submarino buscó ampliar su ventaja por aquello del golaveraje general en caso de empate con el Betis a final de temporada. Baena falló una de las que no suele fallar y, justo antes del descanso, una magistral asistencia del almeriense con el exterior dejó solo a Pepe... y Nico ejecutó el 3-0 de zurda.

Piloto automático

La segunda parte casi que sobró. Yeremy Pino tuvo una muy clara solo en una contra, pero el Villarreal se dedicó a contemporizar y guardar fuerzas. El Leganés lo intentó, pero no pudo con un firme guardameta Luiz Júnior.

«¡Cómo no te voy a querer! ¡Que bote la afición!»... cantaba la afición. Un final feliz con La Morocha como himno y colorín colorado, y otro trago hacia la Champions.

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