Atrás queda ya el mes de febrero, que será recordado por una primera quincena muy dura debido a la ola de frío que se vivió en la provincia. La comarca de Els Ports fue una de las más afectadas por las bajas temperaturas, con mínimas por debajo de los 12 grados negativos, y destacando, sobre todo, la continuidad del frío, viento, nieve y hielo.

Los problemas derivados por las heladas han estado presentes hasta esta semana, aunque en algunos puntos se continúa trabajando. La situación meteorológica ha mejorado notablemente y ha ayudado a que se descongelaran tuberías, depósitos, balsas o incluso las piscinas.

En Vilafranca, la brigada de obras del Ayuntamiento ha trabajado en las últimas semanas para reparar los desperfectos en los conductos de los edificios municipales. Las actuaciones se concentraron, en primer lugar, en el matadero, el polideportivo y el Museu de la Pedra en Sec.

Por su parte, los problemas persistieron en el campo de fútbol del Serrito y en la escuela infantil solucionándose a principios de semana. En el caso del centro educativo, el consistorio se encargaba de llevar agua todos los días para que esta no escaseara.

Respecto a las afecciones en el Serrito, se instó a los futbolistas que disputaron varios partidos a que se ducharan en el polideportivo. La concejala de Obras, Silvia Colom, apuntaba que “las heladas han provocado numerosos daños que se han ido atendiendo”, y añadía que “desde el consistorio se realiza una vigilancia diaria de las instalaciones para detectar cualquier anomalía”.

Pero si hablamos de otros pueblos, el más afectado fue Castell de Cabres. La localidad ha vuelto a la normalidad, pero técnicos de la Diputación evalúan los efectos en las tuberías que han provocado daños de diversa consideración. “El lunes haremos un balance”, indicaba la alcaldesa, Mari Paz Querol. El presidente de la Diputación, Javier Moliner, se interesó en la visita a la comarca de Els Ports de la situación, mostrando su predisposición a ayudar en las obras que se realizan. H