El Ayuntamiento de Burriana está trabajando en el incremento de la seguridad en los alrededores de centros escolares y puntos conflictivos. Uno de los primeros lugares en los que ya se ha actuado es la avenida Cardenal Tarancón. Ayer mismo, las máquinas construyeron un badén poco antes de alcanzar --en sentido de la circulación-- el IES Llombai; y otro en dirección contraria, a la altura de la rotonda de la piscina municipal. Se trata de dos intervenciones que se suman a los badenes de goma ya existentes.

El objetivo de esta medida es evitar que los vehículos alcancen velocidades inadecuadas para esta vía urbana y en la que, la pasada Pascua, falleció un niño de 13 años cuando cruzaba con su bicicleta por un paso de peatones. La asociación de padres y madres de alumnos (AMPA) del centro se movilizó de inmediato para recoger firmas de la población en pro de incrementar la seguridad y ya ha llegado la primera intervención. En las hojas para rubricar se solicitaba la colocación de un semáforo, pero en una vía con una decena de pasos de cebra en cada uno de los sentidos no está muy claro que fuese una medida efectiva. De cualquier modo, el consistorio aún no se ha manifestado a este respecto y, de momento, lo que ha hecho ha sido levantar estos nuevos badenes.

EN LES ALQUERIES / También en las proximidades de les Alqueries de Santa Bárbara se ha realizado una actuación similar ya que, a pesar de que se trata de una vía estrecha, los vehícuos alcanzan velocidades muy superiores. En este caso también se busca que se respete la señalización y no se pasen los 50 km/h marcados.

Pero las intenciones del equipo de gobierno van más allá, pues se pretende tomar cartas en el resto de centros escolares. La idea es prohibir el estacionamiento de vehículos en varios metros previos al paso de cebra utilizado por los alumnos y acompañantes. De este modo, se favorecerá la visibilidad de los conductores y se evitará que algún niño pueda salir pegado a un vehículo que se encuentre allí aparcado.