La festividad de Santiago Apóstol marcó ayer el pistoletazo de salida de las fiestas mayores de Sant Jordi. Por la mañana, una procesión y una eucaristía concelebrada inauguraban los festejos de manera solemne. Los actos en honor a San Jaime y al beato Fray Tobías Borrás Romeu estuvieron presididos por el alcalde, Iván Sánchez, acompañado por los miembros de la corporación municipal, autoridades y las reinas de las celebraciones --la joven Julia Vericat y la niña Leire González-- con sus respectivas cortes de honor. Previamente, el alegre repicar del volteo de las campanas y el pasacalle a cargo de la banda de la Asociación Musical Sant Jordi anunciaban el inicio de las esperadas jornadas festivas.
Concluido el oficio religioso, la comitiva se trasladó al centro cívico, donde el munícipe procedió a inaugurar dos exposiciones --La luz de la noche y La gelada de 1956-- que permanecerán abiertas hasta el próximo 2 de agosto. La masiva afluencia a todos los actos fue la nota predominante durante las primeras horas de eventos.
El primer edil aprovechó para hacer extensiva la invitación a los pueblos vecinos: «Hoy --ayer para el lector-- es un día muy especial para Sant Jordi porque empezamos las fiestas, que hemos preparado con mucho dedicación, y desde aquí quiero llamar a toda la comarca a participar en nuestras celebraciones, disfrutar de la hospitalidad de los vecinos y de la gran variedad de actos».
