Tras más de tres años de parálisis, ha vuelto la actividad a los terrenos de la depuradora de Moncofa. Ahora la empresa responsable está llevando a cabo trabajos de desbroce y limpieza de la parcela, tapado y balizado de los pozos de registro y adecuación de los interiores de la instalación, ya que durante todo este tiempo de abandono había sufrido algunos robos y acciones vandálicas.

Estos son los pasos previos a la reanudación definitiva de las obras, una vez la Conselleria de Hacienda desbloqueó a finales del pasado mes de julio la situación, al autorizar el endeudamiento del Ayuntamiento para finalizar esta actuación, que como afirmó el alcalde, Jaime Picher, en su momento “es nuestra máxima prioridad actualmente”.

Desde la Conselleria de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua confirmaron que en las próximas semanas se continuará con la limpieza del resto de elementos de la EDAR, el relleno con material en la zona de las aceras y el vallado definitivo de la parcela, ya que el que hay ahora es provisional. Asimismo, se pedirán las herramientas necesarias para que se concluya la obra.

Para ello, el consistorio ha firmado créditos por un total de 2,8 millones de euros, además de los 2,4 millones de euros que se han ahorrado en estos tres años de legislatura. Cabe recordar que desde hace un mes ya no se producen vertidos de aguas fecales al mar, puesto que se selló la salida de la estación depuradora de la zona del Camí Cabres y desde entonces se están trasladando los residuos en camiones cisterna.

ENTRE MARZO Y MAYO // Una vez finalizadas las actuales labores de adecuación de los terrenos y las construcciones ya existentes, necesarias tras tanto tiempo de inactividad, se rematarán pequeñas actuaciones en lo que se refiere a obra civil y se instalarán los equipos, por lo que se estima que la nueva EDAR de Moncofa esté finalizada entre marzo y mayo del 2015, según fuentes del Consell.

La nueva infraestructura depuradora y sus colectores generales asociados sustituirán a las dos que existen actualmente en el municipio, la de Camí Marjals Noves, que se quedará fuera de servicio al entrar en servicio la nueva instalación, y la de Camí de Cabres, de titularidad y gestión municipal, que se conectará posteriormente por el Ayuntamiento al nuevo sistema de depuración una vez esté finalizado.

Picher ya dijo que “desde el mes de julio del 2011 este equipo de gobierno ha realizado diferentes gestiones para que las obras se reanudaran, pero en todo este proceso nos hemos encontrado con muchas trabas”. H