El mundo rural valenciano se manifestará este sábado en València para denunciar la «regresión extraordinaria» que sufre pese a que, junto a la industria agroalimentaria que impulsa, genera el 14% del PIB de la Comunitat. El objetivo de la protesta es que las Administraciones atiendan por fin sus reivindicaciones. Bajo el lema Per un món rural viu i la nostra cultura, las principales organizaciones que representan el ámbito rural valenciano pretenden reclamar diálogo con las fuerzas políticas y explicar a la sociedad sus demandas, ante una situación en que sus formas de vida, su cultura y sus costumbres «están ahora seriamente amenazadas».

Así lo explicaron ayer en rueda de prensa el presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja), Cristóbal Aguado; el secretario general de la Unió de Llauradors i Ramaders, Ramón Mampel; y el presidente de la Federación de Caza de la Comunitat Valenciana, Vicente Seguí, que coincidieron en la necesidad de pedir soluciones para revertir una situación difícil.

Los colectivos destacan que pese a su contribución a la economía valenciana, las ayudas europeas que llegan a la Comunitat --170 millones de euros-- y las inversiones de la Conselleria de Desarrollo Rural (unos 352 millones) suman el 3,5% de lo que el mundo rural aporta al PIB.

Ante esto, Aguado ensalzó los valores y las tradiciones del terreno agroalimentario, que abastece de alimentos a la sociedad y conserva el entorno, e instó a los políticos a concienciarse de que la vida y la actividad de la ciudad «se apoya en la agricultura».

Por su parte, Mampel manifestó su preocupación por la disminución de trabajadores en el entorno rural, porque «las personas mayores se mueren» y «solo un 2% tiene menos de 30 años».

Y es que, según un informe que presentaron, el descenso de la población agraria ocupada entre 1985 y el 2017 es del 62,7%, con un total de 96.600 personas menos trabajando en el interior.

Por ello, Mampel llamó «al sentido común para que el mundo rural siga vivo» y para combatir «el desapego» de la sociedad con este sector. Por su parte, Seguí subrayó el papel que juega la caza en el medio ambiente, ya que facilita la sostenibilidad de la fauna y el control de las plagas.