La selección española de balonmano deberá conformarse con pelear el próximo domingo por la medalla de bronce en el Mundial de Qatar, tras perder ayer por 22-26 ante Francia, en un encuentro de semifinales en el que a los Hispanos no les bastó con su emocionante ejercicio de fe en la segunda parte.

Un carácter que permitió a los de Manolo Cadenas volver a meterse en un partido que parecía casi perdido con los cuatro goles de desventaja (14-18) con los que concluyó la primera mitad. Un periodo en el que los galos llevaron siempre la iniciativa.

REACCIÓN INSUFICIENTE // Sin embargo, el carácter no es suficiente para derrotar a un equipo francés, que busca en Doha convertirse en la primera selección en ganar cinco títulos mundiales (su rival será Qatar), como pudo comprobar una España a la que le faltó claridad ofensiva, en unos minutos finales en los que Francia hizo valer sobre la pista el peso de su leyenda.

A base más de voluntad que de juego, lograron de nuevo apretar (21-22) a falta de diez minutos para la conclusión.

Los Hispanos acariciaron la remontada coincidiendo con la exclusión de Xavier Barachet, pero apareció la figura de Omeyer en la portería gala y el conjunto español volvió a caer en los mismos errores que ya le costaron el año pasado la derrota ante este mismo combinado en la semifinal del Europeo.

Ahora queda luchar por la medalla de bronce ante Polonia (mañana, 14.30 horas), que tampoco es mal premio tras una gran trabajo en el Mundial. H