Denis Cheryshev, uno de los futbolistas más desequilibrantes de la plantilla del Villarreal, confía en que el equipo mantenga la buena línea que le ha aupado a las primeras posiciones en Liga y al liderato en Europa League. El internacional ruso ve como “fundamental” lograr la victoria mañana ante el Zúrich y se muestra optimista, que no confiado: “El equipo está fuerte y contamos con la ventaja de jugar en casa, pero tenemos que plantearlo bien”. Preguntado por la doble importancia de ganar la competición continental, al garantizarse el campeón un puesto en la próxima Champions, el extremo responde con sinceridad: “Ganar el título es el aliciente más grande, pero no nos debemos plantear ser campeones sino pelear para serlo”.
DISCUTIBLE TARJETA // Sobre la polémica amarilla que le mostró Clos Gómez ante el Almería y que el Villarreal ha recurrido, espera que Competición haga justicia: “La verdad es que hay contacto. Es una jugada muy rápida, no le veo venir, intento apartarme un poco, pero me derriba”. El jugador incide que “el contacto existe” y pese a que lo más lógico tras ver las imágenes es que los comités le retiren la cartulina, Cheryshev admite que aceptará “lo que venga”.
Sobre los próximos encuentros, el jugador no esconde que tiene una especial ilusión por jugar en el Pizjuán, en el campo de su exequipo: “El del Sevilla será un partido muy especial. Allí juegan compañeros con los que he compartido grandes momentos. Además son segundos y jugando bien, pero con nuestras armas podremos hacerles daño”.
Sobre su situación personal, Chery reconoce que se encuentra en un gran momento: “Desde que llegué me siento muy cómodo, pero no nos podemos relajar ni un momento para seguir creciendo y mejorando”. Para el internacional ruso, “la clave de este equipo está en el ambiente en el vestuario y en el trabajo en cada entrenamiento”. H
