La primera derrota en el estreno liguero no debe alterar los planes del Peñíscola RehabMedic. En primer lugar porque se produjo ante el vigente campeón, el Movistar Inter, y en segundo, porque fue a domicilio. Era lo más lógico, por lo que solo unas horas después del encuentro, Albert Canillas y sus jugadores cambiaron el chip para centrarse en el primer duelo en el municipal, que tendrá lugar el próximo sábado a las 18.00 horas, con el Gran Canaria como rival de turno.

Y es en su pista donde los del Baix Maestrat deben ofrecer su mejor imagen y sumar el máximo de número de puntos para que los objetivos previstos puedan cumplirse. Y después de tres campañas consecutivas disputando el play-off por el título, este proyecto —el quinto en la máxima categoría— debe ir encaminado a lograr los mismos registros.

Por ello es fundamental comenzar en casa con una victoria ante el Gran Canaria, un rival que ya claudicó la pasada temporada (6-3) y que viene de encajar la goleada de la primera jornada, puesto que perdió en su feudo ante el Levante (1-10). Con el fin de que los tres puntos se queden en Peñíscola, Canillas ha preparado seis sesiones durante esta semana.

un espejo donde mirarse / El Peñíscola RehabMedic debe tener como referencia la pasada campaña, en la que consiguió que el municipal fuese un auténtico fortín. Solo dos equipos, el Movistar Inter y ElPozo Murcia, fueron capaces de llevarse los tres puntos en su visita a la localidad del Baix Maestrat, donde se vivió una de las sorpresas de toda la Liga, puesto que el potente Barcelona cosechó una derrota.

De los 15 encuentros que se jugaron en el pasado ejercicio liguero en el Municipal, los de Canillas sumaron 10 triunfos, que unidos a las dos derrotas, dejan un balance de tres empates (Levante, Ríos Renovables Zaragoza y Santiago Futsal). Unos resultados que permitieron al Peñíscola sumar 33 de los 48 que totalizó al finalizar la Liga regular, por lo que fueron fundamentales para estar entre los ocho primeros.