Joan Barreda vivió ayer una jornada para olvidar. Y es que unido a la sanción de una hora que se le comunicó en el campamento de la ciudad boliviana de Tupiza cuando los pilotos descansaban para afrontar la quinta etapa del Dakar -la organización castigó al torreblanquino y a todos los pilotos del Monster Energy Honda Team por repostar en la neutralización de la cuarta etapa-, el día tampoco fue satisfactorio para el piloto provincial, puesto que se perdió nada más pasar por el segundo waypoint, equivocando de esta forma a pilotos que decidieron seguirle como Michael Metge, Xavier de Soultrait o Pablo Quintanilla, que fue el beneficiado del castigo a Barreda y comenzó la jornada como líder.

Así, el de Torreblanca tomaba la salida de la etapa entre Tupiza y Oruro, con 692 kilómetros (447 cronometrados) en el séptimo lugar de la general a 41 minutos del chileno, una distancia que se hizo mayor en el transcurso del día debido al error de Barreda, que provocó que fuese 22º de la etapa a 37.10 minutos del vencedor, Sam Sunderland, que es el nuevo líder tras ser el más listo de todos los pilotos y saber sobreponerse a las malas condiciones del terreno y la baja visibilidad, que provocaron que se neutralizara el segundo tramo de la especial y se pusiese punto final a la misma tras 219 kilómetros.

Con todo ello, el jefe de filas de HRC se queda ahora octavo, a 1.12.39 horas del primer clasificado, por lo que deberá recuperar el terreno perdido en las próximas etapas, que se disputan todavía a más de 3.000 metros de altitud en Bolivia. Y la primera oportunidad es hoy, justo antes del día de descanso, en una jornada entre Oruro y La Paz, con 786 kilómetros de recorrido, de los que 527 serán cronometrados.

Habrá que ver si Barreda es capaz de superar los últimos sinsabores que ha vivido y volver a pelear por el título, toda vez que el vigente ganador, Toby Price, tuviera que abandonar el jueves por una caída.

abandono de sainz / Carlos Sainz, uno de los máximos candidatos a ganar el rallye en coches, no pudo tomar la salida ayer tras el vuelco que sufrió en el transcurso de la cuarta etapa. Después de perder más de dos horas, los mecánicos comprobaron que los daños eran imposibles de reparar a tiempo para seguir en carrera.

Con ello, la quinta etapa se la llevó Sebastien Loeb, su segunda en este Dakar, con un tiempo de 2.24.03 horas, seguido por el español Nani Roma a solo 44 segundos y Peterhansel, que asumió el liderato, a 1:31 minutos.