La cadena de tiendas de ropa Blanco ha anunciado a los trabajadores la liquidación de la compañía y el despido de toda la plantilla. La medida dejará sin trabajo a los más de 800 empleados que quedan en la firma y el cierre de unas 90 tiendas. Después de un largo proceso de reestructuración y de cambios en la propiedad, la actual dirección de Blanco solicitó el concurso de acreedores con el fin de liquidar la firma, lo que fue aprobado por el juez mercantil el pasado 24 de noviembre, según han explicado fuentes sindicales.

Los sindicatos reclamarán garantías para el cobro de las indemnizaciones a los despidos y de los sueldos, ya que tienen que cobrar todavía la nómina de noviembre. La semana que viene comenzará formalmente la negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) para despedir a toda la plantilla.